Luis Rubiales a la jueza sobre el contrato de la Supercopa: “No ha habido contubernio”

Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), declaró este lunes como investigado por supuestos contratos irregulares durante sus cinco años de gestión que apuntan a presuntos delitos de corrupción en los negocios, administración desleal y pertenencia a organización criminal. Rubiales hizo una defensa de su labor al frente de la RFEF y negó cualquier tipo de irregularidad en los acuerdos con Arabia Saudí para que la Supercopa de España se dispute en el país asiático o en la licitación de las obras de reforma del estadio de la Cartuja, concedida a la constructora Gruconsa. En esta empresa trabaja el hermano del director de los servicios jurídicos de la federación, Pedro González Segura. Rubiales solo aceptó la preguntas de la jueza, el fiscal y de sus abogados.

Fuentes de la investigación aseguran que Rubiales se mostró muy exacto a la hora de determinar ciertas preguntas que afectaban al contrato de la Supercopa, pero no tanto para otras que le hizo el fiscal que iban en la línea de demostrar que Kosmos, la mercantil de Gerard Piqué, fue comisionista de la federación y no de la empresa saudí Sela. Kosmos fue beneficiaria de unos 40 millones de euros por ejercer de intermediaria. Sorprendido, el fiscal preguntó a Rubiales por la salvaguarda por la que si Kosmos no cobraba su comisión, la Supercopa no se disputaría en Arabia Saudí. Rubiales, según fuentes de la investigación, respondió que el asesor externo Tomás González Cueto le dijo que la salvaguarda la habían propuesto los saudíes y que esto les beneficiaba porque permitía romper el contrato de manera unilateral. Rubiales también aseguró, según las mismas fuentes, que González Cueto no elaboró un informe sobre el contrato con Arabia Saudí, como era su obligación al ser superior a 30.000 euros, porque fue el mismo asesor externo el que lo estaba negociando y que por ello no pasó por los mecanismos de control internos.

Rubiales explicó a la jueza que, cuando llegó a la RFEF, la Supercopa no interesaba a nadie y, gracias al cambio de modelo, ahora genera 40 millones de euros. “Ese dinero salvó el fútbol porque el fútbol en pandemia hubiera muerto. No ha habido contubernio”, recalcó.

Sobre la contratación de Gruconsa para la remodelación del estadio de la Cartuja, Rubiales la justificó porque era una empresa que cumplía los criterios de la federación y la urgencia era grande por la proximidad de la Eurocopa. El exdirigente granadino también aseguró que le pidieron permiso a la Junta de Andalucía.

Tras casi cuatro horas de declaración, la jueza Delia Rodrigo ha impuesto a Rubiales la obligación de comparecer ante el órgano judicial una vez al mes y cuantas veces sea requerido por el juzgado. Además, se le ha impuesto la obligación de solicitar permiso al juzgado cada vez que quiera salir del territorio nacional; una petición que debe incluir las fechas de salida y regreso, y el domicilio en el que resida durante el tiempo en que esté fuera.

Al término de su declaración, Rubiales atendió a los medios de comunicación: “Me he sometido a todas las preguntas de su señoría, el ministerio fiscal y mi propio abogado. Volveré si es preciso las veces que sean. He estado cuatro horas y estaré en las que sean necesarias. Soy el primer interesado en que todo se aclare. He sido feliz en esos cinco años que he trabajado en la Federación. Me he sentido realizado. La gestión tanto a nivel deportivo como económica ahí está, ha sido muy buena”, dijo Rubiales y concluyó: “He tenido querella de todo tipo y de hecho estoy aquí en un juzgado, pero lo que tengo claro es que al final se hará justicia. Jamás he recibido dinero alguno de manera irregular. Nunca habido licitación alguna de manera irregular. Siempre hemos obrado en la máxima excelencia y buscando la legalidad”.

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