De la Fuente: “Queríamos hacer pruebas”

Había un partido económico y otro deportivo en Londres. España y Colombia se vistieron (literalmente) de visitantes en la capital inglesa. Seis años después de su último enfrentamiento ante una selección sudamericana (6-1, frente a Argentina en el Metropolitano en marzo de 2018), la Roja viajó a la capital inglesa para medirse ante Colombia. “Queríamos calibrar nuestro momento al jugar con rivales tan poderosos. Buscábamos competir. No ha faltado ambición ni seriedad. Solo sabemos jugar para ganar. Hemos estado muy cerca de hacerlo en la primera mitad. Los jugadores se van fastidiados porque no les gusta perder. Nada justifica la derrota”, analizó Luis de la Fuente. Las dos selecciones lejos de casa, consecuencia del acuerdo que firmó la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) el pasado mes de diciembre con Stage Front, empresa de tecnología para eventos y hospitality, también patrocinador del Espanyol, que se apropió del nombre del Estadio Olímpico, el hogar del West Ham en el barrio de Stratford, al este de Londres.

Una excusa (la única alegre en una triste Londres marcada por la noticia de que Kate Middleton, Princesa de Gales, está siendo tratada de cáncer) para que los cerca de 192.000 españoles y los más de 160.000 colombianos que viven en la capital inglesa se pudieran olvidar de la prestigiosa Premier League, sobre todo los aficionados sudamericanos que coparon el Estadio Reina Isabel. Pedro Rocha no se perdió el amistoso de la Roja frente a la tricolor. El presidente interino de la RFEF demoró, sin embargo, su aterrizaje en Londres. Después de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil registrara los despachos Federación el pasado miércoles por presuntas irregularidades en los contratos firmados en la etapa de Luis Rubiales, Rocha cambió su itinerario, en lugar de viajar el jueves con el resto de la delegación, se presentó en Inglaterra el mismo día del partido. Un duelo sin más trascendencia para Luis de la Fuente que buscar alternativas, a la espera de recibir a la pentacampeona del mundo, Brasil, el próximo martes en el Santiago Bernabéu.

Costaba reconocer a España en Londres. No solo por la vestimenta -un amarillo gastado, con un clavel en el cuello, símbolo español desde que Carlos I se lo regaló a su mujer Isabel de Portugal-, sino también por la alineación, repleta de novedades, con un once inicial completamente renovado: Luis de la Fuente cambió todo el equipo respecto del último duelo, entonces por los puntos, ante Georgia en Valladolid. “Queríamos hacer pruebas, ver a algunos jugadores, pero hay que seguir mejorando. Habíamos perdido el control y les hemos dado opciones a hacer su fútbol. En el segundo tiempo no hemos sido capaces de tener ese mismo acierto”, expuso De la Fuente. Al técnico español, al menos, la alineación le sirvió para buscar nuevas alternativas y para recuperar su sistema táctico fetiche, el 4-2-3-1, con la pareja de la Real Sociedad, Merino y Zubimendi, en el doble pivote. “Nuestra manera de jugar es más reconocible el de la primera parte. No ha sido una probatura de partido. Hemos jugado de la manera que creíamos poder ganar. Nos ha costado reaccionar”, dijo De la Fuente.

Le faltó, en cualquier caso, fluidez para agitar el partido, esencialmente el balón, alejado Joselu del área de Vargas -ningún remate en los 61 minutos que estuvo en el campo-, silenciados los mediapuntas (Sarabia, Gerard Moreno y Oyarzabal), atrapados en el entramado defensivo de Colombia, que estiró hasta 17 partidos su racha de imbatibilidad. “Sí se puede, sí se puede”, gritaba la hinchada colombiana. Era la respuesta a la tibia España, frágil en defensa -el debutante Vivian, de 24 años, perdió el duelo ante Luis Diaz, en la jugada que terminó en el gol de Múñoz-, sin respuestas en ataque. La segunda fila de España no funcionó, pero tampoco lo hicieron las primeras espadas de De la Fuente. Ni la experiencia de Morata, tampoco el desparpajo de Lamine Yamal y de Nico Williams pudieron romper a la defensa colombiana.

El duelo ante Colombia sirvió, por lo menos, para celebrar el debut de Pau Cubarsí, además del estreno de Remiro. “Estamos contentos por eso. Queríamos que vivieran esa experiencia. Tienen un gran futuro y necesitamos que tengan esa oportunidad en estos partidos para que cuando nos juguemos puntos tengan ya experiencia”, recordó De la Fuente. El defensa catalán, el jugador del Barcelona número 142 que se estrena en la Roja, se convirtió en el segundo jugador más joven en estrenarse con la absoluta: 17 años y 60 días. El podio es todo de la Masia, el primer lugar lo ocupa Lamine Yamal (16 años y 57 días) y la tercera posición es de Gavi (17 y 62), hoy recuperándose de la rotura de los ligamentos cruzados que sufrió el último noviembre. Funcionó el duelo económico, no el deportivo. España, sin embargo, brindó por la juventud ante Colombia, en una amarga jornada en Londres, sin respuesta de las segundas filas, a la espera de Brasil el martes en el Bernabéu.

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