Hamilton pilla a trasmano a Verstappen en Hungría

Este sábado en Hungría entró en escena un nuevo condicionante para la cronometrada, inicialmente previsto para que se estrenara en el Gran Premio de Emilia Romagna que se tuvo que cancelar por las inclemencias meteorológicas. Se trata de un experimento que también se aplicará en Monza (septiembre) y que limita el margen de operatividad de las estructuras. Con este marco, los pilotos se vieron obligados a emplear la especificación más dura de neumáticos en la primera eliminatoria (Q1), para pasar a la media en la segunda (Q2) y terminar con los compuestos más blandos, en la tercera (Q3). Un meneo de tal calibre abrió la puerta a la incertidumbre y a las sorpresas. Sobre todo entre los equipos grandes, que evitaron rodar con las gomas duras el viernes. Entre eso, la lluvia que cayó en el primer ensayo y la undécima posición de Max Verstappen, hubo quien insinuó una pequeña crisis en la tropa del búfalo rojo. Una tiritona hasta cierto punto justificada si tenemos en cuenta que Red Bull perdió por primera vez esta temporada una pole position, que en Budapest (15:00 horas, Dazn) ocupará Lewis Hamilton. Esta es la número 104 en la hoja de servicios del británico, que sigue ampliando su récord, y la novena que suma en Hungaroring, otra plusmarca que lleva su firma.

Un año y medio después, el heptacampeón de Mercedes volverá a arrancar sin tráfico gracias al manejo que hizo de su autocontrol, que fue el elemento que le llevó a adjudicarse la mejor vuelta a pesar de no ser el más rápido en ninguno de los tres sectores del circuito. A su lado saldrá Verstappen, que se quedó a solo tres milésimas del corredor de Stevenage (Gran Bretaña), mientras que la segunda línea la encabezará Lando Norris, menos de una décima más lento que su compatriota. Fernando Alonso comenzará el octavo y Carlos Sainz, el undécimo, en la primera cita de este 2023 en que no se clasifica para la Q3.

Esta reformulación puntual del formato trasciende a la cronometrada, dado que a cada piloto tuvo a su disposición un total de 11 juegos de neumáticos, dos menos de los habituales. Eso, sin embargo, sí tuvo un impacto directo en la jornada del sábado, dado que hubo quien prefirió reservar algún set y rodar menos, para no limitarse estratégicamente con vistas a la carrera. Sobre todo, en lo relativo a la variante más dura (solo tres juegos, por cuatro del medio y del blando), que para muchos es la que rinde mejor en este escenario. Y allí es donde a Verstappen se le escapó su sexta pole consecutiva, por más que el muchacho de Hasselt se vaya a presentar como principal candidato al triunfo, especialmente si tenemos en cuenta el ritmo que exhibió en las tandas largas de vueltas. Eso será el domingo, pero el subidón a Hamilton ya no se lo quita nadie. “Creo que no respiré en toda la vuelta. Ha sido un año y medio de locos. El equipo ha trabajado mucho. Perdí hasta la voz en el coche. No esperaba pelear por la pole”, convino el de Mercedes, que sigue sin renovar su contrato con la marca de la estrella, que expira a final de año. La mejora del W14 facilitará el entendimiento entre las partes, sobre todo si atendemos a que la alternativa más realista a las Flechas de Plata es Ferrari, completamente fuera de foco. “Espero que la actualización del monoplaza signifique estamos yendo en la dirección correcta”, añadía Hamilton.

“Tuve problemas todo el fin de semana para encontrar el equilibrio. No hemos tenido el coche que acostumbramos”, resumió Verstappen. “De todas formas, un mal día con un segundo lugar, tampoco es tan malo”, concluyó el de Red Bull.

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