De la personalidad de Unai Simón al temple de Busquets
Laporte disputó todos los minutos, y Azpilicueta y Sarabia asaltaron el once. Este es, uno por uno, el balance en la Roja en la Eurocopa
La personalidad de Unai Simón, la jerarquía de Azpilicueta, el liderazgo de Busquets, la explosión de Pedri y el asalto a la titularidad de Sarabia fueron algunos de los hitos individuales de los 24 seleccionados españoles.
Unai Simón
Su capacidad para rehacerse del mal control con el pie que supuso el primer gol de Croacia ha sido uno de los grandes episodios de esta Eurocopa. Una personalidad arrolladora para no vencerse y seguir arriesgando con el pie. Con la parada a Pasalic en el inicio de la prórroga contra los croatas y los dos penaltis que le detuvo a Suiza le coronaron como el gran héroe.
Marcos Llorente
Luis Enrique le citó como lateral derecho y en esa demarcación fue titular en los dos primeros partidos. Tuvo piernas para llegar al área contraria, pero en defensa se le apreció algo desorientado. Dejó la impresión de que no se ganó un lateral y se perdió al llegador clave en el título liguero del Atlético.
Azpilicueta
Luis Enrique le concedió la titularidad en el tercer partido ante Eslovaquia y ya no perdió el puesto. Le ganó el pulso a Marcos Llorente porque le dio sobriedad y jerarquía a la línea defensiva. No se le recuerda un error en todo el campeonato y estuvo más que correcto en la salida del balón y en sus incorporaciones al ataque. Marcó el 2-1 contra Croacia
Laporte
De menos a más. El único jugador de campo que ha disputado todos los minutos (630). Bajo el foco desde el primer momento por su nacionalización exprés. Jugó y sufrió en el perfil derecho cuando Luis Enrique transgredió al clasicismo alineándole con Pau Torres para formar una pareja de centrales zurdos. Su progresión se describe de cómo Lewandowski le ganó el espacio para marcar el gol del empate polaco hasta su imponente partido con Italia en los cruces y en la salida del balón. Nadie ha intentado más pases (690) desde la Euro de 1980.
Pau Torres
Titular en los dos primeros encuentros. Más blando de lo esperado. Perdió el puesto en el tercer partido y lo recuperó contra Suiza, pero volvió a dar síntomas de fragilidad. Mejor con la pelota que defendiendo.
Eric García
Se benefició de su compenetración con Laporte, con el que ha compartido línea en el City. Enseñó su mejor virtud, su impecable salida de balón. Correcto en los cruces.
Jordi Alba
El mejor en ataque durante muchas fases de los encuentros por su profundidad. Luis Enrique le dio descanso de inicio en el encuentro de octavos. Regresó al once como una moto en el cruce de cuartos frente a Suiza, en los que un disparo suyo que rebotó en Zakaria adelantó a España. Una asistencia y el jugador que más ocasiones de gol ha generado (12).
Rodri
El positivo por coronavirus de Busquets le ofreció la ocasión de terminar de consolidarse como el otro gran mediocentro de referencia de la selección. Llegó al torneo muy justo de fuerzas y eso le llevó a no arriesgar. Se refugió con exceso en pases de seguridad en horizontal o hacia atrás.
Busquets
Luis Enrique decidió esperarle y acertó. Le dio otro aire al juego desde su aparición en el tercer partido contra Eslovaquia. Con él en el campo, todo pareció más natural y la posesión menos funcionarial. Erigido como un gran líder silencioso y menos estridente que Ramos. Transmitió tranquilidad y la selección creció en el campeonato a partir de su figura.
Pedri
Con solo 18 años no se vio sobrepasado por la exigencia del torneo. Solo se perdió un minuto, el último de la prórroga ante Suiza. La mezcla de sus cualidades puede marcar una época si se afila con el gol. No ha realizado ni un disparo a puerta en todo el torneo. Hasta las semifinales, el jugador que más distancia recorrió, con 76,1 kilómetros. Con la pelota enseñó maestría para aguantarla y distribuirla. Dejó gestos técnicos de pura escuela canaria y algún pase filtrado memorable. El español más joven en debutar en una gran competición de selecciones.
Koke
Trabajador incansable en la presión, perdió fuelle en los dos últimos encuentros. Se consolidó junto a Busquets y Pedri como el tercer volante. Le faltó el gol en algunas ocasiones claras. Una asistencia.
Sarabia
Llegó como el último de la fila y saltó a la primera línea por su capacidad para atacar los espacios. Dos goles y una asistencia. Una contractura muscular le impidió disputar la semifinal cuando nadie discutía ya su titularidad.
Dani Olmo
Perdió el puesto en el tercer partido en favor de Sarabia. La lesión de este le concedió la titularidad ante Italia. Su interpretación de lo que debe ser un falso nueve ante Chiellini y Bonucci fue perfecta y solo quedó empañada por el error en la tanda de penaltis. El mejor asistente español (3) en una Eurocopa junto a Silva (2008) y Cesc (2012). Nadie ha rematado más veces en el torneo (21), pero no marcó.
Morata
Protagonista de principio a fin. Primero por sus fallos ante el gol y por tener que soportar, además del enfado popular, insultos y amenazas a su familia. Entremedias emergió un delantero de faena, entusiasta como primer hombre de la presión. Terminó con el error del penalti que supuso la eliminación, pero con tres goles, lo que le convierte con seis en el máximo goleador de España en la historia de la Eurocopa.
Ferran Torres
Mejores números, dos goles y una asistencia, que juego. Contó con la fe que le tiene Luis Enrique para ser titular en cuatro partidos.
Gerard Moreno
Cinco partidos y solo dos titularidades para el máximo goleador español de curso, que encabezó la segunda unidad. Dos asistencias y un penalti fallado. Gris como Oyarzabal y Thiago. Gayá cumplió ante Croacia. Traoré solo disputó 12 minutos contra Eslovaquia. Diego Llorente, De Gea y Robert Sánchez no participaron.
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