Mendilibar y su sentido común toman el Sevilla
El club andaluz cierra la caótica etapa de Sampaoli y busca una salvación tranquila con el vasco, que firma hasta final de curso
En menos de 24 horas, el Sevilla destituyó a Jorge Sampaoli y contrató a José Luis Mendilibar. El club andaluz puso fin a la etapa del argentino en el banquillo de un equipo destinado a pelear por la Champions que, sin embargo, está a dos puntos del descenso. Los dirigentes del Sevilla salieron asustados el pasado domingo del Coliseum Alfonso Pérez, donde su equipo ofreció unas sensaciones horribles ante un rival directo en la derrota por 2-0 contra el Getafe. A Sampaoli no se le perdonó el enorme nerviosismo que transmitía a los jugadores, su persistencia en una salida del balón desde atrás con el portero de mucho riesgo y la insistencia en un mensaje que no llegaba a los futbolistas, que ya no se cortaban para afirmar en público que no entendían lo que el técnico les pedía.
“Quiero agradecer a los jugadores y a cada empleado del club por habernos acompañado”, afirmó Sampaoli en una carta de despedida, en la que también se acordó de la afición. No así del presidente, José Castro, ni tampoco de Monchi, el director deportivo. Al argentino le enfadó conocer por la prensa que el Sevilla negociaba en Madrid con Mendilibar. Cuando se le notificó la destitución, estaba bastante enojado. Sus abogados pelearon el finiquito de un entrenador que tenía contrato hasta 2024 y que saldrá cobrando lo que se le debe hasta final de este curso.
El Sevilla se encomienda a Mendilibar, el tercer entrenador de una temporada caótica después de Julen Lopetegui y Sampaoli. Y lo que desea Monchi es, precisamente, huir de ese caos con la figura de un entrenador como el vasco, quien a sus 62 años emprende la aventura de mayor envergadura de su dilatada carrera, donde entrenó, entre otros, al Athletic Club, Osasuna, Valladolid y Eibar.
A su favor jugó también que aceptara firmar solo hasta final de temporada, ya que el Sevilla no desea hipotecarse de cara a la próxima campaña, inmerso como está en un periodo de inestabilidad deportiva e institucional. Con Mendilibar se pretende asegurar una salvación tranquila, confiados en el sentido común que desprende un técnico con un amplio bagaje en Primera y que, además, ha sabido entender las necesidades del club tanto en lo deportivo como en lo económico.
Mendilibar abandona los paseos por el bosque en compañía de su mujer para volver a la rueda y entrenar a uno de los grandes de Primera División. Dirigió el primer entrenamiento en compañía de su cuerpo técnico, formado por Fran Rico como segundo entrenador y Toni Ruiz como preparador físico. Tendrá el caramelo de dirigir al Sevilla ante el Manchester United en los cuartos de final de la Liga Europa (13 y 20 de abril).
Pero, sobre todo, lo que desean en el club andaluz es que Mendilibar comande una transición tranquila para poner fin a esta delicada temporada, marcada por la errática planificación de Monchi, hasta ahora sinónimo de éxito. El ejecutivo falló de manera evidente en la confección de una plantilla en la que ya no se encuentran futbolistas como Isco, Dolberg y Januzaj, rutilantes fichajes el pasado verano. “Me he equivocado mucho, sin duda, pero este año todo lo que puede salir mal sale peor”, aclaró el propio Monchi en una comparecencia con los medios desplazados a Estambul en el partido europeo contra el Fener-bahçe.
El Sevilla lleva sin ganar fuera de casa desde el 15 de octubre (0-1 al Mallorca): cinco derrotas y tres empates. En lo que lleva de Liga, un equipo destinado a meterse en la Champions ha sido incapaz de estar clasificado ni una sola jornada entre los 10 primeros (la plaza 12ª ha sido la más alta conseguida).
Mendilibar vuelve a entrenar después de seis temporadas en el Eibar, donde cuajó un gran trabajo hasta el último curso, cuando el equipo vasco descendió a Segunda. Peor le fue luego en el Alavés. Dmitrovic, Jordán y Bryan Gil, ahora en la plantilla del Sevilla, coincidieron con Mendi en el Eibar. El propio Dmitrovic, al conocer la llegada de Mendilibar, renunció a la convocatoria de la selección de Serbia para ayudar al nuevo entrenador y a su equipo.
Puedes seguir a EL PAÍS Deportes en Facebook y Twitter, o apuntarte aquí para recibir nuestra newsletter semanal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.