Golden State estrena la pretemporada de la NBA con una victoria sin brillo ante Washington

Ha vuelto la NBA pero el baloncesto estelar aún está por llegar. Golden State Warriors, los vigentes campeones, han descorchado este mediodía la pretemporada con un partido sin fuegos artificiales ante los Washington Wizards en Saitama, Japón. En el pabellón donde se disputó la última final de los Juegos Olímpicos, los de San Francisco se desperezaron de cara a la defensa de la corona con una victoria (96-87) sin exprimir a sus figuras y dando brillo a sus secundarios. Stephen Curry solo disputó 13 minutos, igual que Draymond Green, y Klay Thompson ni siquiera saltó al parqué. Kerr confirmó que el escolta no participará en la gira japonesa por precaución, teniendo en cuenta su historial de lesiones.

En lugar del mítico Big-Three, James Wiseman reclamó el protagonismo. El pívot, al que una rotura en el menisco de su rodilla derecha le dejó año y medio fuera de las canchas, presentó su candidatura para entrar en la rotación esta temporada con 10 puntos y nueve rebotes. En los Wizards brilló especialmente el héroe local Rui Hachimura, uno de los tres japoneses que juega en la NBA. El público, al darse cuenta de que el mago Curry no ofrecería ninguna función, comenzó a animar a su compatriota, que se fue hasta los 13 puntos y nueve rebotes.

Golden State controló el partido desde el arranque en el que los dos equipos dejaron claro que no había nada en juego. Con Curry de inicio y unas defensas algo relajadas, se esperaba un festival desde el perímetro. Pero la pólvora sigue mojada después de las vacaciones. Los de Kerr mandaban con poco (41-37 al descanso), pero su rival tampoco exigía un esfuerzo mayor. Los Wizards encestaron un solo triple en los 20 intentos de la primera parte, por los tres aciertos de los Warrios en 17 lanzamientos. Curry se fue al descanso con un bingo, su única canasta de campo, y cuatro pérdidas. Ya no volvió el MVP de la última final de la NBA, tampoco Green.

Tras el descanso, Hachimura salió con dos marchas más que el resto y puso a los suyos en la disputa. Pero unos Warriors al tran tran arrancaron la locomotora y asestaron un parcial de 10-0 que enfrió la reacción de los capitalinos, que tampoco exprimieron a sus figuras a excepción del nipón, el único que alcanzó los 25 minutos en pista. En la pasarela de secundarios, los Golden State demostraron el músculo de su banquillo con la fuerza de Wiseman y el acierto de DiVincenzo (dos de tres en triples, nueve puntos y siete rebotes). A pesar de que Washington parecía acercarse por momentos, a los Warriors les valían con arrerones esporádicos para volver a marcar distancias. Sin apuros, cerraron una victoria que tampoco sirve para medir el potencial del equipo, pero para eso está la pretemporada. El 18 de octubre comenzará el verdadero espectáculo.

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