Otra ruina defensiva del Atlético
El equipo de Simeone encaja cuatro goles en cuatro disparos precedidos de errores colchoneros y ha recibido 30 tantos en 22 duelos. “Falta atención”, admite el técnico
Cuatro disparos y cuatro goles encajados llevaron a Diego Pablo Simeone a pronunciar una frase tan inédita en su boca como el dato que la originó. “Está claro que tenemos que mejorar en la parte defensiva, en la ofensiva estamos bien porque tuvimos ocasiones para marcar, pero en cada ocasión que nos generaron nos hicieron un gol”.
Jornada a jornada, las estadísticas son demoledoras y agrandan el socavón defensivo que rodea a Jan Oblak: 30 goles en contra en 22 jornadas y el noveno partido de los últimos 12 en el que el conjunto rojiblanco recibe dos o más goles. En los 10 años de Simeone en el banquillo del Atlético, esta es la tercera vez que su equipo encaja cuatro goles en un partido de Liga; la última, en 2015, también fue en el Camp Nou (4-1). “Necesitamos mucha más atención en el área y más intensidad en los duelos”, diagnosticó Simeone, que nunca en su carrera como técnico había tenido que responder partido tras partido por la debilidad defensiva. “Llevamos 10 años defendiendo extraordinariamente y este no nos está generando lo que habitualmente sí. Debemos mejorar, viene una semana para insistir en este tipo de acciones. Nos faltó suerte y atención también”, insistió el preparador argentino.
La bacanal goleadora del Barcelona se pudo intuir desde los primeros compases del encuentro. La primera circulación larga que hizo el Barça terminó con una apertura de Sergio Busquets a Adama Traoré. Esa primera cita con Mario Hermoso, alineado de inicio como lateral por Simeone, anunció la misma escabechina de centros laterales y errores defensivos crónicos que desde octubre han enterrado cualquier aspiración del campeón de revalidar el título. Hermoso, inferior en cintura y en piernas, solo pudo cortar la salida de Adama con falta. Luego, el gol de Carrasco no pudo sostenerlo el Atlético ni dos minutos. En cada tanto del Barcelona al menos hubo un error defensivo de los jugadores del Atlético. Entre Koke y Hermoso no acertaron a despejar una pelota fácil en el área que acabó con el centro de Alves y la prodigiosa volea de Alba. En el segundo, Traoré rompió a Hermoso y Gavi (1,73 metros) se impuso a Vrsaljko (1,81) en el salto. En el 3-1, tras repeler el larguero el cabezazo de Piqué, Ferran Torres y Araujo pudieron rematar sin oposición. El cuarto lo embocó Alves anticipándose a João Félix en un centro atrás después de que Gavi le ganara la espalda a Wass.
“Hay que valorar la contundencia del rival e intentar mejorar la intensidad, la agresividad y la concentración. Empezamos ganando, controlando posicionalmente, dando espacios a Carrasco y João, tuvimos tres situaciones en el primer tiempo, dos de João y una de Savic. Ellos fueron contundentes. Más allá de posesiones largas y contragolpes, gana el más contundente”, abundó Simeone. “No hemos cambiado muchos futbolistas, salvo Trippier, que se fue. Están jugando los mismos que el año pasado respondieron a gran nivel. Giménez y Savic han faltado a varios partidos, pero esta vez jugaron y nos metieron cuatro. Lo que cuenta es trabajar, intentar mejorar y afrontar la semana con humildad y hasta el final apretar”, concluyó el técnico rojiblanco, que respondió con un “no” seco cuando le preguntaron si el Barça de Xavi le había sometido.
Uno de los aludidos por Simeone, Stefan Savic, que reaparecía tras un mes y medio de baja, no pudo ocultar su irritación por las concesiones al Barça. “Las sensaciones son muy malas cuando encajas cuatro goles y encima con tantos errores en defensa. Lo tenemos que cambiar si queremos estar en Champions el año que viene”.
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