El ‘Dream Team’ invisible de la NBA

La temporada regular de la NBA se encamina hacia su ecuador y un ramillete de estrellas sigue en el limbo. John Wall pactó con los Houston Rockets que no jugaría mientras se negociaba un traspaso que sigue siendo inviable, y no juega. Ben Simmons hizo algo parecido en los Sixers, aunque su caso se complicó. Doc Rivers, su entrenador, lo expulsó de uno de los primeros entrenamientos en octubre. A principios de noviembre alegó que no se encontraba en condiciones anímicas para jugar. Continúa inédito esta campaña.

Kyrie Irving se mantiene en sus trece de no vacunarse. Aunque lo que sí ha cambiado ha sido el criterio de los dirigentes de los Brooklyn Nets, que han reconsiderado su decisión de apartar del equipo a un jugador que no puede jugar los partidos en casa porque las autoridades de Nueva York exigen la vacunación en los recintos cerrados. Los Nets, ahora, quieren alinear de nuevo a Irving, aunque solo pueda ser fuera de casa. Para colmo de males, la reincorporación se retrasa, no solo por las exigencias de la NBA a los jugadores no vacunados, sino porque el primer día que Irving se reincorporó dio positivo por covid.

Las paradojas de la NBA se acentúan estos días en que un batallón de jugadores entra y sale de esos protocolos de la covid, los equipos hacen recuento de efectivos día a día y han sido tantas las ausencias que se han aplazado nueve partidos, por ahora. Mientras, una colección de figuras vaga lejos de las canchas. Algunos encadenan lesiones, otros alegan motivos tan difusos como Wall, Simmons o Irving. Podrían formar un equipo de lujo, un dream team invisible. Entre esos jugadores que siguen sin estrenarse esta temporada figuran seis de los 20 mejores pagados: John Wall, segundo, tras Stephen Curry, con 39,1 millones de euros; Kawhi Leonard, octavo, con 34,6; Klay Thompson, 11º, con 33,4; Kyrie Irving, 16º, con 30,9; Kemba Walker, 17º, con 30,8; y Ben Simmons, 20º, con 29,1.

La competición espera con los brazos abiertos la reaparición de Klay Thompson, posiblemente en enero. El alero de Golden State se operó la rodilla izquierda en julio de 2019 y el tendón de Aquiles en noviembre de 2020. Los Warriors han conseguido volver a los puestos de cabeza —se disputan el liderato del Oeste con Phoenix Suns— a pesar de la baja de Klay Thompson y de James Wiseman, el número dos del draft de 2020, ausente desde que se operó de la rodilla derecha en abril.

La situación de Zion Williamson es ya desesperante para los New Orleans Pelicans. El rocoso ala-pívot de 21 años, 1,98 metros y 128 kilos, número uno del draft de 2019, destinado a marcar una era en la NBA, no ha podido debutar esta temporada. Se operó en secreto del pie derecho, compareció con exceso de peso antes del inicio de la campaña y recayó de la lesión en diciembre. No se prevé que reaparezca antes de finales de enero o febrero. Planea sobre su carrera la advertencia de Charles Barkley. El gordo Barkley, como le llamaban al que fuera miembro del dream team en 1992, basándose en su experiencia personal, advirtió ya en los inicios de la carrera de Zion: “Pesa casi 130 kilos. No puede jugar así, con ese peso. Es mucha presión para las rodillas. Es muy grande y fuerte, pero todo el mundo en la NBA es fuerte y grande”.

Otro número uno del draft, el de 2017, Markelle Fultz, acumula más ausencias que partidos disputados. Empezó su carrera en Filadelfia con una misteriosa e inexplicable crisis de juego. El 6 de enero se cumplirá un año desde que se rompió los ligamentos de una rodilla. El base de los Orlando Magic continúa sin fecha de reaparición.

Kawhi Leonard es tan buen jugador como enigmático. El alero de los Clippers fue operado el 14 de julio del ligamento cruzado de la rodilla derecha, que se había lesionado un mes antes en las semifinales del Oeste contra Utah, y no se sabe cuándo volverá a la actividad. Otros jugadores que no han podido jugar esta temporada son Victor Oladipo (Miami), Jamal Murray (Denver) y Brook Lopez (Milwaukee), operado de la espalda tras el primer partido.

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