Jovic vuelve al grupo tras una semana aislado en casa por haber estado con un positivo por coronavirus

Luka Jovic regresó este martes a los entrenamientos en grupo del Real Madrid después de pasar una semana aislado en su casa por haber estado en contacto con una persona con coronavirus. Un amigo suyo, procedente de Belgrado, dio positivo y, al conocerse el resultado, el delantero blanco fue recluido en su domicilio hasta asegurarse de que no estaba enfermo.

En estos siete días ha pasado tres controles y en todos ha dado negativo. Las autoridades sanitarias contemplan dos negativos en cinco días para dar por limpio a un paciente. Sin embargo, los protocolos médicos del club añaden una prueba adicional. Este lunes superó el último test y este martes ha podido reincorporarse al grupo en Valdebebas.

La pandemia ha supuesto el colofón a una temporada muy accidentada para Jovic y muy insuficiente desde el punto de vista deportivo. El confinamiento lo pasó casi íntegramente en Belgrado, adonde viajó con un permiso especial de la entidad blanca pocas horas antes de que el Gobierno español decretara el confinamiento general. Sin embargo, allí incumplió la cuarentena al abandonar su vivienda, lo que provocó las críticas del Ejecutivo de su país. Él se justificó diciendo que desconocía las normas.

Ya en Madrid y a tres días de volver a los entrenamientos, los servicios médicos le diagnosticaron “una fractura extraarticular en el hueso calcáneo del pie derecho” que se atribuyó a una de las últimas sesiones de trabajo realizadas en su domicilio. Y, con la recuperación en marcha, su novia publicó unas fotografías de una barbacoa casera en la que, además de Jovic, participaban Maksimovic, del Getafe, y Saponjic, del Atlético de Madrid, que también generaron cierto ruido.

En esas imágenes se le podía ver con una aparatosa férula en su pierna. La lesión prácticamente le descartaba para lo que restaba de Liga, aunque consiguió volver. Jugó unos minutos en Bilbao. Sustituyó en el descuento a Benzema para perder tiempo. Ese fue el único instante que se le ha podido ver a Jovic sobre el césped en estos meses. Al día siguiente tuvo que aislarse en casa. Ahora regresa al trabajo en Valdebebas, y todavía dispone de dos partidos (jueves contra el Villarreal y domingo ante el Leganés) para calzarse las botas y, salvo sorpresa, aparecer en la foto de los campeones. Costó 60 millones el pasado verano y en lo que va de curso solo suma dos goles.