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Zozulya se defiende: “No soy nazi”

El jugador ucranio del Albacete dice que el Rayo le dio razones políticas para no ficharle y explica sus polémicas fotos

Zozulya, en rueda de prensa. En vídeo, declaraciones de Zozulya.Foto: atlas | Vídeo: Albacete | atlas

El jugador ucranio del Albacete Roman Zozulya se ha defendido este jueves de las acusaciones de simpatizar con el fascismo y el nazismo tras la suspensión del partido entre su equipo y el Rayo Vallecano el pasado domingo por los cánticos de “¡puto nazi!” que profirió parte de la afición vallecana. “No quiero a gente en mi equipo que defiende violencia y racismo. No soy nazi”, afirmó el delantero en la única frase que ha pronunciado en castellano en una rueda de prensa en el estadio del club manchego. El delantero, con ayuda de una traductora, ha explicado que se reunirá con la directiva del Albacete y que “seguramente” denunciarán los comentarios e insultos que recibió el jugador no solo durante el partido, sino también a través de las redes sociales.

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Zozulya, cuyo fichaje fue frustrado por la afición del Rayo Vallecano por su vinculación con grupos ultras como lo Dnipro White Boys o el batallón Azov —una milicia de voluntarios ultranacionalistas ucranios que combate contra las fuerzas prorrusas en el este del país desde 2014—, ha cargado contra el equipo madrileño. El futbolista ha subrayado que cuando fichó por el Rayo, en verano de 2017, se reunió con responsables del club —a quienes no ha identificado— que le explicaron que no podía jugar en el equipo: “Pregunté por qué y me dijeron yo era fascista. Me dijeron que yo apoyaba al ejército de mi país mientras ellos ayudan al otro ejército en Donbás [zona este de Ucrania donde se libra el conflicto]. Seis personas de su afición están combatiendo en el otro extremo de la guerra, por el otro país”[RUSIA]. Consultado por EL PAÍS, el club madrileño ha aplazado cualquier pronunciamiento posible al respecto.

La publicación de varias fotografías suyas con simbología supremacista y con una bufanda de Stepán Bandera, una figura destacada y controvertida del nacionalismo ucranio, anticomunista vinculado con la Alemania nazi, provocaron entonces el rechazo de la mayoría de la afición rayista, que clamó contra su fichaje. “Empezaron a llamarme fascista, nazi y racista. Yo quería explicar que esto no era verdad, pero dijeron que no querían escucharme. Me da igual su color o nacionalidad, para mí todos mis compañeros son iguales”, se ha justificado este jueves.

Imágenes de Zozulya.
Imágenes de Zozulya.Twitter

El jugador ha querido explicar dichas imágenes comprometidas. De la fotografía con la efigie de Bandera, Zolulya ha apuntado que la compartió en sus redes sociales por “el parecido físico” que comparten. La imagen en la que el ucranio posaba con un fusil en las manos se tomó, según ha dicho, mientras llevaba “ayuda humanitaria de Cruz Roja al frente, para los militares”. De la instantánea en la que señala a un marcador electrónico de una cancha de baloncesto en el que figura el resultado 14-88 (cifras vinculadas al neonazismo) ha comentado que se trataba de un “partido benéfico” que disputó en Ucrania y ha asegurado que desconocía el significado de esos números. “Solamente me sorprendió que la diferencia del marcador fue muy grande. Cuando viajé a España, al Rayo Vallecano, me dijeron que estos números tenían un significado. Hasta ahora yo sigo sin entenderlo”, ha insistido.

Por su parte, el Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol no ha manifestado todavía su fallo sobre la suspensión del partido. El órgano disciplinario está recabando más información sobre los cánticos del encuentro antes de decidir si sanciona al Rayo además de ordenar la reanudación de los 45 minutos restantes a puerta cerrada. El partido marchaba 0-0 al descanso.

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