Claver y Kuric entonan al Barça ante el Maccabi
El equipo de Pesic, tras un discreto inicio, abruma al equipo israelí en la segunda parte
El Barcelona superó a un clásico como el Maccabi de Tel Aviv (74-58) y se ganó el derecho a observar la clasificación de la Euroliga sin complejo de inferioridad. Es algo que hacía muchísimo tiempo que no sucedía, especialmente tras sus dos últimas desastrosas campañas europeas. Con su tercera victoria después de haber empezado con dos feas derrotas que volvían a presagiar lo peor en esta edición, ha cambiado por completo el panorama.
BARCELONA, 74; MACCABI, 58
Barcelona Lassa: Pangos (7), Kuric (13), Claver (14), Singleton (9), Tomic (12) –equipo inicial-; Séraphin (6), Hanga (2), Blazic (0), Heurtel (6) y Oriola (5).
Maccabi Tel Aviv: Roll (7), Wilbekin (2), Kane (7), O'Bryant (10), Tyus (9) –equipo inicial-; Ray (2), Caloiaro (11), Dibartolomeo (6), Cohen (4) y Zoosman (0).
Parciales: 18-12, 16-21, 25-7 y 15-18.
Árbitros: Boltauzer, Jovcic y Mantyla.
Palau Blaugrana. 6.772 espectadores. Quinta jornada de la Euroliga. El Barcelona suma tres victorias y dos derrotas.
El equipo de Pesic ha conseguido por fin afirmarse en su juego, evitar errores de bulto y mantener la consistencia y continuidad mínimas exigibles de las que había carecido ese ciclo tan negativo. En ese contexto se encumbran jugadores a los que les costaba brillar. El caso más llamativo ante el equipo israelí fue el de Víctor Claver. Con 14 puntos, siete rebotes y dos asistencias lanzó a su equipo, al que inyectó muy buenas sensaciones.
El ala-pívot valenciano desplegó su capacidad para dominar a sus rivales arriba y abajo y para dar réditos excelentes para su equipo. A Claver se añadió Kyle Kuric, que llevaba un tiempo destemplado, sin el acierto que le caracteriza en los lanzamientos. Pero ante el Maccabi recuperó la puntería que tanto temen sus rivales y anotó tres triples y 13 puntos. Y Tomic se mantuvo en el notable que casi siempre alcanza, con 12 puntos y ocho rebotes.
El Barcelona sufre algunos apagones, algunos minutos en los que se le atraviesa alguna piedra en el camino, caso de Johnny O’Bryant, exala-pívot de Milwaukee Bucks, o lagunas propias como las dificultades que tuvo para resolver el crucigrama defensivo que dispuso Neven Spahija, el entrenador croata, ese viejo conocido que del baloncesto español que ejerció en Vitoria y Valencia.
Spahija no pudo contar con Tarik Black, expívot de los Lakers y los Rockets, lesionado. Tampoco se mostró en las mejores condiciones Scottie Wilbekin, el base-escolta estadounidense que es uno de los pilares del equipo pero que salía de una lesión.
El Maccabi llegó a situarse por delante (28-31) cerca del descanso. La reacción del Barcelona tras el receso fue fulminante. 10-2 de salida, 25-7 en el tercer cuarto. Ya en el último se situó con 23 puntos de ventaja (67-44). Faltaban seis minutos, pero el partido estaba resuelto.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.