El Gran Canaria supera al Fuenlabrada en una fiesta anotadora

El Herbalife Gran Canaria, subcampeón copero en 2015, alcanzó las semifinales del torneo por tercera vez en su historia tras derrotar al encomiable Montakit Fuenlabrada en una fiesta anotadora. Un chaparrón de canastas y baloncesto desinhibido. En el duelo entre el anfitrión de la Copa y el equipo revelación de la Liga se impuso la lógica a la utopía. Balvin y Aguilar, a 18 puntos por barba, y Radicevic (15) lideraron a los amarillos que viajaron de un inicio titubeante a un final festivo. Con 107 puntos el Granca firmó la tercera mayor anotación sin prórroga en un partido de Copa, a 10 del récord del Barcelona en la semifinal de la 1986-87 (117) ante el CAI Zaragoza.

Dispuesto a apurar su aventura copera desde la intrepidez, el Montakit Fuenlabrada se presentó en el Gran Canaria Arena con un parcial de 12-22 en ocho minutos. Vargas y Olaseni aprovecharon la ansiedad del anfitrión para hacer camino sin reparar en la escasez de recursos. Llegaban los del Che García a la cita sin sus dos principales referentes, Marko Popovic y Blagota Sekulic (de baja por problemas en el sóleo y el tendón de Aquiles respectivamente), pero manteniendo el espíritu gremial con el que firmaron la mejor primera vuelta de Liga de su historia.

Dos triples de Aguilar y uno más de Radicevic bastaron sin embargo al Herbalife para quitarse los miedos y comenzar a carburar antes de cerrar el primer cuarto (25-27, m. 10). Superado el destemple, los de Casimiro comenzaron a aprovechar la erosión de la rotación fuenlabreña con Balvin ejerciendo de martillo pilón. Con 12 untos del pívot checo en el segundo acto, los anfitriones agarraron con fuerza los mandos del partido. En apenas dos minutos, los amarillos sacudieron el marcador con un parcial de 14-2 que dejó grogui al Montakit (44-37, m. 14). Sin embargo, el ejército rojo rearmó su fe con nueve puntos de Eyenga y cinco de Smits para asomar de nuevo la cabeza (50-51, m. 18). El poderío de unos y el orgullo de los otros deparó un primer tiempo vibrante con un tanteo histórico: 58-52. La suma de 110 puntos representó la cuarta mayor anotación al descanso en un partido de Copa.

Fueron los últimos coletazos del Fuenlabrada que, a la vuelta del entreacto, pagó sus limitaciones. Con el protagonismo episódico de Seeley (8 puntos en ese tramo) y la intendencia constante de Balvin, el Herbalife despegó hasta los 15 puntos de ventaja antes de entrar en la recta de meta (79-64, m. 29). No le alcanzó al Fuenlabrada con las ocho asistencias y los 20 puntos de Paco Cruz (13 en el último cuarto), ni con los 16 de Eyenga. Los de Casimiro no cedieron en su aplicación y tuvieron tiempo de ajustarse el maillot para la foto y de recibir el calor de su hinchada. Dos triples de Aguilar (5 de 6 desde la línea de tres) cuando el Fuenlabrada había remado hasta acercarse a ocho puntos acabaron con cualquier dilema y desataron la fiesta insular. El anfitrión está en semifinales de Copa.