Kepa, en el ojo del huracán

Más que el temporal de frío y nieve que azotó ayer al País Vasco, lo que dejó tiritando al Athletic fue la eliminación en la Copa a manos de un Segunda B. El equipo de Ziganda, que marcha el 16º en la Liga con 13 puntos, no ha cerrado todavía el pase a la siguiente fase de la Europa League. Le vale un empate la semana que viene en Ucrania contra el Zorya, pero si pierde —y en la primera vuelta perdió en casa—, también se despediría de esa competición.

En ese estado de incertidumbre, dudas y depresión recibe este sábado el Athletic (20.45 Movistar Partidazo) al Real Madrid. Zidane se reía ayer cuando le preguntaron si la mala semana vivida por el equipo de Ziganda y la decepción de la hinchada harían que el ambiente de San Mamés no sea tan infernal como suele ser en las visitas del conjunto blanco. “El público va a apoyar a su equipo como siempre, no creo que llegando el Madrid van a ir en contra de los suyos”, dijo el técnico.

Por si la semana no había sido lo suficientemente amarga para el Athletic, se suma el runrún alrededor de Kepa, su guardameta de 23 años pretendido por varios clubes, entre ellos el Madrid. El lunes el club emitió un parte médico en el que se informaba de que el portero sufría un esguince en el tobillo. En las redes se desataron todo tipo de conspiraciones: que si la lesión no era verdad, que si Kepa quería evitar jugar contra el Madrid, que si tal y que si cual.

El portero, que termina contrato en junio, no ha cerrado todavía su renovación con el Athletic ni aclarado su futuro. Ziganda tuvo que salir el martes a acallar las malas lenguas. “Quien dude de Kepa que venga aquí y le mire el tobillo. Mi miedo es que no esté del todo recuperado y se empeñe en jugar”, explicó el técnico. El jueves y ayer el portero se entrenó junto al resto de sus compañeros por lo que estará a disposición de Ziganda para esta noche.

El hecho de que Kepa no haya renovado aún mantiene al Athletic en alerta. Si no firma la renovación antes del 1 de enero, tendría libertad para negociar con cualquier club. Y muchas son las novias que le cortejan y la presión que debe gestionar a su edad. El PSG y el Madrid son dos de los clubes que están interesados en él. Las lesiones de Keylor Navas y los errores de Kiko Casilla en los últimos partidos han convencido al club de la necesidad de un guardameta [el tercero, Luca, está lesionado], aunque en principio no para el mercado de invierno sino para junio. Zidane tendría la última palabra y de momento no ha hecho ninguna petición al club ni ha hablado con el club sobre el mercado.

“Keylor es el mejor”

Ayer le preguntaron varias veces al técnico francés. Algunas de forma muy directa. ¿Kepa es mejor que Keylor? “Yo siempre tengo a los mejores y Keylor es el mejor. Estoy con Keylor, con Kiko y con los que están aquí. Kepa es muy buen portero, sin duda, pero no es mi portero”, respondió. ¿Pagaría 20 millones [la cláusula] para tener a Kepa en enero? “Yo me quedo con Keylor y con Kiko y luego veremos cuando se abra el mercado si alguien va a venir”, contestó de nuevo Zidane. ¿Le gustaría que Kepa fuese su portero en un futuro? “Yo hablo de mis porteros, no de los jugadores que pueden venir aquí en el futuro, que hay muchos y buenos”, zanjó.

En Bilbao nadie sabe a ciencia cierta qué quiere hacer Kepa, que debutó hace un mes con la selección española. Nacido en Ondarroa, llegó al Athletic cuando aún no había cumplido 10 años. Fueron cuatro amigos de la localidad pesquera y les cogieron a los cuatro. Los había captado José Mari Bengoetxea, un exjugador del Athletic y del Barakaldo. Ha pasado por todas las categorías del fútbol: alevines, infantiles, cadetes, juveniles, Tercera, Segunda B, Segunda (cedido por el Athletic) y Primera. Esta noche actuará en el ojo del huracán.