Pedrosa se lleva la pole en Sepang mientras Márquez solo puede ser séptimo tras una caída

Marc Márquez intentaba marcar terreno. Su plan pasaba por exprimirse al máximo durante los días previos a la carrera, sin pensar demasiado en las consecuencias, ni mirar mucho a la general. Así compite el español, sin escatimar esfuerzos. Y en un intento (que le honra) por mandarle un mensaje a su rival, Andrea Dovizioso, que él sabe que está más fuerte, anda más seguro sobre su moto en este trazado y no se siente tan exigido sobre su máquina como apurado está por las circunstancias en sí y el reto de enfrentarse a su primera oportunidad de ganar un título de MotoGP, el de Honda cometió un error. Y el plan se fue al traste. Tan al traste que este domingo saldrá desde la tercera fila de la parrilla (con el séptimo mejor tiempo de este sábado) del gran premio de Malasia (a las 8.00 en Movistar MotoGP), mientras Dovizioso lo hará desde la primera, en la tercera plaza, junto a Pedrosa, el más rápido, y Zarco, segundo.

Más información

¿Se han vuelto las carreras de MotoGP demasiado agresivas?

Márquez empezó la jornada asombrando a unos y a otros. Con una de esas no caídas tan suyas. Uno le ve asomarse al asfalto y rebañarlo como se rebañan los platos cuando se está hambriento. Con todo su cuerpo. Que no quede nada. Pierde el control del tren delantero, la inercia le vence y cuando parece que ya ha caído, logra, con el antebrazo, el codo, el hombro; con la rodilla, la espinilla… y con un golpe de gas magistral volver a enderezarse. Eso ocurrió un día en Brno y la secuencia de foto dio la vuelta al mundo. ¿Caída o salvada? Parecía un acertijo. La había salvado. Como la salvó durante el último libre de este sábado en Sepang, el escenario donde quiere proclamarse campeón de MotoGP por cuarta vez.

Sin embargo, no pudo repetir la hazaña algo más tarde. Salió a morder en la sesión de clasificación. Si tenía que contemporizar en algún momento del fin de semana sería, como mucho, durante la carrera. Todavía no. Y ni siquiera pudo completar una vuelta lanzada. Se cayó a los pocos metros de terminarla, en la última curva, un viraje largo, que une las dos grandes rectas del trazado malayo. Regresó rápido al box y se montó en su segunda moto. Logró un tiempo para salir del paso, que luego mejoraría, pero no lo suficiente. Saldrá el séptimo, su peor resultado en toda la temporada: en Italia, su peor gran premio hasta la fecha, se clasificó sexto.

A diferencia de las malas sensaciones que pareció tener Márquez en la pista este sábado, el aumento de la temperatura (34ºC en el ambiente, 48º en el asfalto) y la ausencia de lluvias desde la mañana propició mejoras de los tiempos en general. La mayoría de pilotos bajó de los dos minutos y el abanico de candidatos a la pole position se fue ampliando tanto que hasta Pedrosa, muy retrasado en las sesiones libres, se colocó en cabeza y acabó llevándose el mejor tiempo en los últimos segundos, para desgracia de Zarco, que quería volver a repetir. No falló Dovizioso, que estuvo a punto de llevarse la primera pole de la temporada, pero no le importó perderla por escasas milésimas. Saldrá desde la primera fila. No le hace falta más. Ni una de sus cinco victorias ha nacido en la pole.

“Hice una vuelta perfecta, eso es lo importante. Estoy muy contento por salir desde la primera fila. Creo que somos bastante competitivos. A ver cómo se comporta el tiempo mañana”, dijo al bajarse de la moto. Márquez depende de sí mismo para llevarse el título este domingo, pero una victoria del italiano le complicaría las cosas.