“Con tiempo, con paciencia, y con Isco”

Hubo quien se desmayó por el calor en el descanso en las gradas del Coliseum Alfonso Pérez. 25 grados marcaba el termómetro. Parecían diez más en el campo. Y sí, el calendario dice que estamos a mediados de octubre. Tiritó el Madrid, pese a la solana, durante un buen rato, desde que le empató el Getafe en el minuto 55. Solventó el encuentro en los minutos finales, igual que lo hizo el Barça hace algunas semanas.

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Lo resolvió gracias a un pase magistral de Isco y gracias al primer gol de Cristiano Ronaldo en esta Liga. El malagueño, sentado en el banquillo hasta el minuto 71, cambió el partido en cuanto entró. Isco se ha ganado el estatus de imprescindible. Si hasta hace unos meses el debate era Bale o él, ahora el debate es: ¿es oportuno que descanse? Necesitó el Madrid de su magia —por algo le han puesto ese mote en el vestuario— para reconducir un partido que se le había puesto cuesta arriba. Cristiano enganchó el balón que le envió el malagueño y celebró el 1-2 con tal rabia que saltaron todos los del banquillo y corrieron hacia él en la banda. “Era importante que se desbloqueara”, comentó Zidane, conociendo el estado de ansiedad con el que el portugués vive su relación con el gol.

¿El equipo necesita a Isco más que nunca?, le preguntaron al técnico francés, que esta tarde cumplía cien partidos en el banquillo del Madrid. “Necesitamos a todos los jugadores, a Isco… pero también a los demás, tenemos muchos futbolistas importantes y los que tienen la oportunidad de jugar lo hacen bien. Las individualidades son las que marcan las diferencias, sí, pero es el equipo el que gana”, contestó.

Poco después, admitió, sin embargo, la evidencia: Isco había sido fundamental. “La segunda parte fue más complicada, con el cambio de dibujo y de jugadores encontramos el hueco. Lo encontró Isco con un pase por la espalda de la defensa adelantada del Getafe”, analizó Zidane. Aseguró el técnico que en ningún momento temió por el resultado. “Los partidos duran 90 minutos y sabemos que podemos marcar en cualquier momento. Los diez primeros minutos de la segunda parte, nos ha costado. Con tiempo y con paciencia, supimos volver. Isco entró muy bien en el partido”, analizó Zidane, al mismo tiempo que aseguraba que iba a marcharse a casa a ver el Atlético-Barcelona. “A ver si podemos recortar”.

Sergio Ramos con suero

Consiguió el Madrid su decimotercera victoria seguida fuera de casa. Le preguntaron al técnico si no tenía la sensación de que el equipo, con tantas rotaciones, había tenido que llegar hasta el límite para hacerse con los tres puntos. “Es una victoria merecida. Nos esperan seis partidos de aquí a finales de mes y tengo que valorar eso”, zanjó.

Uno de los que no rotó fue Sergio Ramos. El capitán, al que le suministraron suero por la mañana por unos vómitos, no quiso faltar.