La espera recompensada de Sergi Roberto
El polivalente centrocampista de la Masia se convierte en el mejor socio de Messi
Hay pocos jugadores más pacientes que Sergi Roberto, quizá porque sabe del tiempo que tardaron Xavi e Iniesta en alcanzar la titularidad después de ser distinguidos como símbolos de la cantera del Barça. Ni siquiera haber debutado a los 19 años en una semifinal de la Liga de Campeones disputada en el Bernabéu (2011), resuelta a favor del equipo azulgrana por 0-2, le ayudó a acelerar su pase del Miniestadi al Camp Nou. Tampoco fueron suficientes una segunda y hasta una tercera actuación sobresaliente en Chamartín, la última el pasado Sant Jordi (2-3) y la anterior en ausencia en el equipo titular de Messi (0-4). El jugador de Reus (1992) volvió a ser uno de los destacados en el encuentro de vuelta de la última Supercopa jugada en Madrid (2-0).
No se recuerda un partido en el que no haya cumplido como centrocampista, jugador abonado al notable alto, y la temporada pasada defendió de manera meritoria el lateral derecho, una demarcación difícil de cubrir desde la partida de Alves. Los méritos acumulados, sin embargo, no parecían nunca suficientes para garantizarle una plaza en la plantilla profesional azulgrana, plagada de medios, reforzada ahora con Paulinho y a la espera posiblemente de Seri. Hasta que Sergi Roberto se enfadó y mostró su disposición a abandonar el club si finalmente alguno de los equipos de la Premier que se interesaban por sus servicios pagaban la cláusula de 40 millones impuesta por el Barcelona.
No le gustó ser suplente de la pretemporada iniciada con Valverde. El técnico le redimió en la Supercopa y sobre todo el domingo contra el Betis. Sergi Roberto fue uno de los mejores del partido, punta de lanza de la presión azulgrana, el socio perfecto de Messi. “Estoy contento con mi actuación”, afirmó a la salida del encuentro ante los verdiblancos en el Camp Nou. “A nivel personal ya me sentí satisfecho en Madrid. Jugué en mi posición natural, quizá un poco más adelantado, y ahora siento la confianza del entrenador”, argumentó al tiempo que Valverde afirmaba: “Quería un jugador que nos lanzara la presión y me pareció que Sergi nos podía ayudar. Nos ha ido muy bien. Y, además, ha marcado un gol, cosa que no es habitual. Tiene energía, un gran despliegue y su trabajo nos puede ayudar”, sobre todo en momentos de provisionalidad como los que vive el Barcelona.
Oferta por Coutinho
Valverde aguarda a los fichajes y espera también las salidas, y del balance se sabrá finalmente la posición de Sergi Roberto en el Barça. Ahora mismo, en cualquier caso, resulta imaginar a una plantilla sin Sergi Roberto, un jugador polivalente, paciente y el mejor representante de La Masia. El centrocampista azulgrana estuvo muy activo en el estreno de la Liga y además departió a menudo con Messi, que pasó a jugar de falso delantero centro en ausencia de Neymar —traspasado al PSG— y de Luis Suárez, que causará baja unas cuatro semanas después de su lesión en el Bernabéu.
El fichaje de Semedo y la recuperación de Aleix Vidal auguran que Sergi Roberto recuperará su condición de volante, ya sea diestro o izquierdo, incluso con capacidad de actuar de medio centro, por su buena condición física y técnica, protagonista de jugadas espectaculares como el gol que supuso la remontada ante el Paris Saint Germain. El jugador funciona igual de bien en el 4-3-3 como en el 4-2-3-1 que montó Valverde para agitar al plantel ante el Betis.
A la espera de que se incorpore Paulinho, recupere Iniesta y pueda llegar Coutinho —la última oferta del Barça al Liverpool es de 90 millones fijos más 40 de variables— , Sergi Roberto espera cuanto menos no perder la plaza de titular el sábado contra el Alavés en la segunda jornada de Liga.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.