Prueba el reloj inteligente The Mission de Nixon

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El Mission de Nixon se lanzó como el primer reloj inteligente del mundo realmente para deportes de acción y parece que en diseño y construcción lo es.

Empecemos por el diseño. A mí me encantan los relojes, los de toda la vida, y el The Mission tiene un diseño que hace que te fijes en él. Con una corona de 48 mm de diámetro, para los apasionados de los relojes grandes y míticos como el Panerai Radiomir 1940 de buceo, esto es un plus. He oído algunas personas quejarse de que es muy grande para mujeres, no entiendo porqué una mujer no puede llevar un dispositivo con pantalla grande, yo creo que luce igual de potente en la muñeca de hombres o mujeres. Además, la forma que sugiere un hexágono y los colores, negro gris y naranja, aunque el reloj es completamente personalizable, le dan un aspecto sólido y muy fresco y deportivo.

La construcción

No puse aprueba la resistencia a los golpes del reloj con un martillo neumático, aunque le aseguro que le di un buen tute por la montaña, sin preocuparme lo más mínimo si se golpeaba con algunas ramas o se mojaba. Cosa que no hago con mí smartwacht personal el Samsung Gear S2. Y, efectivamente, tampoco hice una prueba de inmersión para ver si es hermético más allá de las 10 atmosferas. El fabricante nos indica que el reloj está construido en una caja de policarbonato con un cristal reforzado Gorilla Glass de Gorning que resiste los golpes y un bisel de acero quirúrgico que protege la pantalla táctil. Parece que es resistente a los golpes previsibles para hacer Surf o Snow, sobre todo esto último con la cantidad de caídas de espaldas que se producen en las pistas, donde lo primero que choca contra la nieve son las manos.

El reloj consta con una certificación de hermetismo hasta los 100 m, lo que le capacita para hacer surf, nadar o practicar kayak en aguas bravas, pero desde luego no bucear. El buceo precisa de mecanismo que aguanten hasta los -200 metros. Pero en honor a la verdad el reloj está pensado para surfistas y esquiadores, no buceadores.

Las correas son de caucho, que es lo que mejor aguanta la humedad y el agua de mar. Hay más de 20 modelos diferentes para personalizar, de hecho, el Mission soporta más de 40,000 combinaciones diferentes si tomamos en cuenta el bisel, la correa, las pantallas y las inscripciones en la caja. Yo creo que con el naranja o el negro han dado en el clavo y no hace falta cambiar más, pero para gustos los colores. En referencia a las correas, solo una pequeña nota a parte: suelen romperse por la cara interna, no las del Mission en particular, si no las de casi cualquier reloj, y la fractura no es perceptible hasta que se rompe del todo. Algún reloj de buceo se me ha ido a mí por la borda pensando que tenía la correa perfecta. Hay que revisarlas de vez en cuando.

Prestaciones

La pantalla de The Mission es grande y se ve perfectamente, incluso para los que sufrimos de presbicia. Es de 1,39 pulgadas AMOLED (Matriz activa de diodos orgánicos emisores de luz) y, aunque es más nítida utilizando la mano de pantalla, ante condiciones de alta luminosidad ambiental puede ser consultada y manipulada sin problemas.

El cerebro de la bestia lo integra el procesador Qualcomm Snapdragon Wear 2100, que por lo visto es de lo mejorcito en rendimiento y eficiencia energética que hay ahora en el mercado. Y el sistema operativo es Android Wear. El Mission dispone de una aplicación integrada, con dos funciones, que es la que dan identidad al reloj.

Surfline con la que se obtiene a tiempo real las condiciones meteorológicas de los spots de surf seleccionado. Mareas, altura de las olas, temperatura, viento predominante. En la prueba comprobé el Palmar y Zarautz, y fue impresionante como coincidió el reloj con la AEMET.

La otra función es The Mission app Snow que como indica, da toda la información sobre las estaciones de esquí: tiempo, temperatura, nieve, remontes, km esquiables, cuando fue la última vez que nevó y la predicción del tiempo. Por supuesto, también alarma de las estaciones seleccionadas, por si cae una buena nevada. Aparte de información en vivo, The Mission app tiene una función soportada por el GPS, Trace, que permite hacer seguimiento del tiempo y distancia recorrida en las jornadas de surf y esquí o Snow. Si se quiere más cantidad de datos, cantidad de saltos, duración en el aire, altura , etc., se puede utilizar el dispositivo Trace con sus app correspondientes para surf y Snow.

Ni que decir tiene que practicando surf es un poco difícil contestar el teléfono, pero mientras se esquía es bastante útil poder hablar a través del reloj sin necesidad de desabrochar la chaqueta para sacar el móvil, sobre todo en días fríos. El Mission incorpora un micrófono protegido con una membrana de goretex para asegurar la impermeabilidad, con el que se puede atender llamadas (sin poder conversar porque no tiene altavoz) o dar órdenes a Ok Google.

Con el Android wear se dispone de más prestaciones como establecer alarmas, iniciar cronómetro, controlar la música o disparador remóto de la cámara del móvil. Para ser sincero no he comprobado estos servicios, se los he supuesto como el valor en la mili.

Hay ciertos sensores que no tiene el Mission como pulsómetro, barómetro o termómetro y además la batería no me duró más de 24 horas, aunque no estoy seguro si durante la prueba consumí mucha batería haciéndolo funcionar constantemente. Por todo ello el Mission no es un reloj para hacer senderismo durante varios días o utilizarlo en una sesión de trail running, el mercado ofrece otras mejores opciones para estas actividades.

La carga se realiza a través de conector magnetizado con conexión USB, bastante cómoda de usar.

Conclusión

El Mission es un reloj que marca estilo, está pensado para surfers y snowboarders, también vale para esquiadores claro, pero usted ya sabe a lo que me refiero. Es un reloj que viste e identifica, con un diseño seductor, quizá porque la estética del surf es muy atractiva. El modelo naranja o el negro, pero principalmente, naranja da carácter. Y las prestaciones que ofrece golpean en la diana de las necesidades de sus usuarios "objetivo". Si por mi fuera, le añadiría más sensores y aplicaciones, los que he nombrado antes, mas un profundímetro, y además lo haría resistente a -200 metros, quizá serían accesorios y seguramente el precio final se veria seriamente afectado. Pero si mejoraría la duración de la batería.

En definitiva, es un smartwacht robusto, wearable sólido en hardware y software y el diseño atrapa el espíritu surfer.