Messi baja el ritmo

En 1987 después de haber puesto en jaque la supremacía de todos los dioses en Nápoles y Argentina, Diego Maradona se presentó en el programa de televisión de Juan Carlos Altavista, conocido por su personaje de Minguito. La actuación del Pelusa conmovió, una vez más, a la gente en Argentina. Casi 30 años después, el actual icono de la Albiceleste, Lionel Messi, anunció su adiós a la selección, tras perder la tercera final consecutiva. Y el cómico Minguito, ahora interpretado por Miguel Ángel Rodríguez, tenía un mensaje para la Pulga. “En Argentina te queremos. Si no querés jugar más, igual te lo vamos a agradecer toda la vida, porque vos estás puesto en el mundo para dar alegrías”, expresó el comediante.

Las palabras de Minguito conmovieron a los argentinos, sobre todo a la familia Messi. Y Miguel Ángel Rodríguez se puso en contacto con Jorge Messi, para que el 10 del Barcelona estuviera presente en su programa. Y así sucedió. “Yo había estado en el plató el día de Maradona en el 87. Eso fue impresionante”, explica Miguel Ángel Rodríguez; “Diego es diferente de Lionel. Diego cantaba, bailaba, pero Lionel es un chico muy bueno”.

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Messi, que no había hablado desde que había anunciado su adiós a la selección, mostró su lado más humano junto a Minguito, explicó su cambio de look (pelo platinado y con barba) y la decisión de dejar la Albiceleste. “Lo del pelo fue porque necesitaba empezar de cero otra vez. Lo que dije después de la final fue lo que sentí”, explicó Leo. Y Rodríguez analiza el porqué de la catarsis del 10. “Creo que el personaje lo hizo relajar. Minguito es un personaje chaplinesco, muy de barrio y cercano a la gente”, asegura Rodríguez.

Minguito le robó una sonrisa a un dolorido Messi. El 10, que llegó a Argentina con molestias en el adductor izquierdo, jugó ante Uruguay (1-0 para la selección de Bauza con el rosarino como goleador) y tras una charla con los servicios médicos de la AFA, decidió emprender su regresó a Barcelona. “Me duele un poco el pubis, a medida que pasaban los minutos se me iba cargando y me molestaba un poco más”, explicó Leo, después del encuentro contra la selección de Luis Suárez. “Si fuese por él juega siempre, quería estar también en el partido ante Venezuela, pero entendió que se tiene que cuidar”, explican desde el entorno del rosarino.

Messi regresó el domingo a Barcelona y ayer pasó nuevos controles. “Las pruebas realizadas confirman que persisten las molestias en el adductor izquierdo. Se aconseja bajar la carga de entrenamientos durante los próximos días”, anunció el Barça en un comunicado. Las lesiones en el pubis son complejas y Messi lo sabe. “Es complicado porque no es fácil de controlar”, aseguró el 10 azulgrana. Y ayer publicó en Facebook: “Está todo bien, tengo que bajar el ritmo y seguir recuperándome con fisioterapia, pero nada preocupante”. El Barça recibe al Alavés el sábado y su presencia está en el aire. En cualquier caso, la buena noticia para Luis Enrique (que también tiene a André Gomes en la enfermería), es el regreso de Neymar, tras colgarse el oro olímpico en Río 2016. Por ahora, Messi deberá hacer algo que no lleva muy bien: descansar. Lo hará con buena sabor de boca, Argentina ganó a Uruguay y Minguito le robó una sonrisa.