A Guardiola le sobran delanteros en el Manchester City

El Manchester City ha anunciado este martes de forma oficial la contratación del alemán de 20 años Leroy Sane, procedente del Schalke 04, que será citizen las próximas cinco temporadas. Con este fichaje, el equipo de Guardiola ya ha firmado, en el mes que llevamos de mercado, a tres jugadores de la parcela ofensiva: Sane, Zinchenko y Nolito, que se suman a la gran nómina de atacantes que el técnico catalán se ha encontrado a su llegada a Manchester: De Bruyne, Silva, Nasri, Navas, Sterling, Agüero, Iheanacho y Bony. En total, el entrenador catalán dispone de 11 jugadores para, en principio, tres puestos de ataque, que podrían convertirse en cuatro según el esquema que elija Guardiola. 

El último en llegar, Sane, es una de la gran apuesta citizen de lo que llevamos de mercado de verano. Ha invertido 50 millones de euros en el internacional alemán de 20 años, mientras que por Nolito no tuvo que pagar más que 18 (su claúsula de rescisión en el Celta) y por el joven ucraniano de 19 años Oleksandr Zinchenko abonaron dos millones al Ufa ruso. 

A la espera de que llegue algún otro atacante de primer nivel mundial, Guardiola ya tiene overbooking en todos los puestos de ataque y será Txiki Begiristain y la secretaría técnica del City la encargada de buscar salida a los que no se ganen un puesto en la pretemporada.

Con la jerarquía bien establecida del Kun Agüero en el puesto de delantero centro, Wilfied Bony es el que más posibilidades tiene de salir, después de no haber triunfado pese a los más de 30 millones de euros que pagó el City al Swansea por él hace año y medio. El nigeriano de 19 años Kelechi Iheanacho, tras su eclosión la pasada temporada (14 goles y siete asistencias en 36 partidos), se perfila como el suplente ideal para seguir creciendo bajo la tutela del argentino, siempre y cuando no llegue otro punta que le reduzca los minutos de que pueda disponer.

En los extremos, las llegadas de Nolito y Sane dejan en una situación delicada al franco-argelino Samir Nasri que, entre lesiones y desconfianza por parte de Pellegrini, la temporada pasada solo jugó 13 partidos con la camiseta celeste. Si Nasri saliera, Guardiola se quedaría en su plantilla con los dos puestos de las alas doblados, con cuatro jugadores de gran nivel: Raheem Sterling y Nolito en la banda izquierda, y Jesús Navas y Leroy Sane en la derecha.

Con los tres puestos de ataque cubiertos en el teórico sistema 4-3-3 que podría utilizar Guardiola, el problema está en encontrar sitio a los tres media puntas que tiene en la plantilla: uno de los fichajes de este verano, el joven Zinchenko y, probablemente, los dos mejores jugadores del club, David Silva y Kevin de Bruyne. Si jugaran los dos en banda en un 4-3-3, todos los extremos se quedarían fuera. Aunque Guardiola decidiera jugar con un esquema más cercano al 4-2-3-1, tendría que relegar a un costado a uno de los dos. Otra opción es retrasar la posición de alguno de ellos (más propenso para ello es Silva) pero el fichaje de Ilkay Gundogan, un medio centro creativo, parece alejar esa idea.

El alemán de origen turco, que fue fichado del Borussia Dortmund por algo menos de 30 millones de euros, llega para dar un aire nuevo a un centro del campo venido a menos, donde todavía sigue la columna vertebral de los últimos años: Toure, Fernando y Fernandinho, además de un hombre de rotación como Fabian Delph.

En la defensa, la única línea todavía sin reforzar (aunque según los medios británicos la firma del central del Everton de 22 años John Stones está muy cercana), los problemas que sufrió Manuel Pellegrini en sus tres temporadas en el Etihad no parecen en camino de solucionarse. A la criticada nómina de centrales del City (Otamendi, Kompany y Mangala) solo se ha sumado el belga Denayer, que vuelve tras cesión del Galatasaray. Mientras que, de momento, mantiene a los cuatro laterales de la temporada pasada: Kolarov y Clichy en la izquierda y Zabaleta y Sagna en la derecha.