¿Cuál es el origen de la San Silvestre vallecana?

Los casi 40.000 participantes de la carrera popular y el brillante cartel de atletas de élite de la profesional convierte la cita de Madrid en la más importante del planeta el último día del año. Sin embargo, para encontrar sus orígenes hay que remontarse hasta hace casi un siglo en Brasil.

¿Cuál es el origen de la San Silvestre?

La San Silvestre es una carrera popular de 10 kilómetros que se celebra cada año el 31 de diciembre. Nació en São Paulo, Brasil, en 1925, de la mano de Cásper Líbero, fundador del periódico A Gazeta. El periodista se inspiró en una carrera nocturna a la que asistió en París en la noche de año nuevo de 1924, y en la que los corredores portaban antorchas. Líbero pasó la carrera a la noche de San Silvestre, el 31, cerca de la medianoche. En la primera edición, que tuvo un recorrido de 6.200 metros, participaron unos 60 corredores y el ganador marcó un tiempo de 23 minutos y 10 segundos.

¿Cuándo llegó a España?

A veces los acontecimientos importantes se gestan en las circunstancias más cotidianas. Una firma en una servilleta, un encuentro fortuito o, como en este caso, una charla en una cafetería. Así fraguaron Antonio Sabugueiro, Carlos Roa y Manolo Fernández el gran premio de Madrid, el embrión de la San Silvestre vallecana. Fue en 1964 y apenas atrajo a un centenar de corredores. El periodista de Marca José Luis Gilabert fue testigo de la prueba, y al día siguiente escribió el diario deportivo que Madrid ya tenía su San Silvestre. Sabugueiro le pidió permiso para utilizar ese nombre, y en 1966 la carrera ya se celebró el último día del año. Ahora, en toda España se celebran más de 200 carreras el día de San Silvestre, aunque la más importante es la de Madrid. En Valencia este año correrán 17.000 personas. 11.300 corredores participaron el año pasado en la Cursa dels Nassos en Barcelona, que también se celebra el 31.

Los protagonistas de este año

San Silvestre le hará este año su particular homenaje a los obstaculistas. "Estará el mejor de todos los tiempos, Ezekiel Kemboi (Kenia); el mejor blanco, Evan Jager (EE UU); y el mejor de España, Sebastián Martos", analiza Rober Aláiz (León, 25 años), quinto de Europa en 5.000 metros y dos veces tercero en la San Silvestre Vallecana. El atleta leonés volverá a repetir lo que se ha convertido para él en una tradición: reunirse con 20 amigos para participar en la carrera de San Silvestre más importante del mundo y pasar la Nochevieja en la capital. "Es la mejor del mundo por el ambiente, por la incertidumbre de los días previos y por los eventos que ha organizado el patrocinador", añade. 

El keniata Ezekiel Kemboi es cuatro veces campeón mundial en los 3.000 obstáculos (2009, 2011, 2013 y 2015) y dos veces oro olímpico (Atenas 2004 y Londres 2012). "Kemboi ha dicho que este es su ultimo año, así que es un buen momento para juntar a los mejores", abunda Aláiz. El estadounidense Evan Jager (EE UU) tiene la 13ª mejor marca de la historia de los 3.000 obstáculos, aunque su mejor posición es un quinto puesto en los Mundiales de 2013. Pero el atleta leonés no duda en destacar un nombre como el rival más duro:  "Este año hay un claro favorito. Mike Kigen, que ganó el año pasado, aunque este vaya de tapado".

El propio Aláiz es otra de las figuras destacables del evento. Su objetivo es colarse en la final de los Juegos Olímpicos, algo que solo será posible si logra el billete a Río en el próximo campeonato de España. Para prepararse, en abril pasó 21 días en Kenia en un Centro de Alto rendimiento, donde pudo entrenarse en altura y rodearse de los mejores atletas. "Allí no hay distracciones, no hay casi agua potable ni luz. Pero no es precariedad, es que aquí tenemos demasiadas cosas", reflexiona. Allí volverá el año que viene, donde espera acelerar su entrenamiento con la mente puesta en la cita olímpica.

Vallecas marcará la diferencia

El recorrido partirá de la plaza de los Sagrados Corazones, cerca del Santiago Bernabéu y acabará en Vallecas, en el estadio del Rayo. "Es una carrera tremendamente rápida los primeros tres o cuatro kilómetros. Luego llanea y los últimos dos son cuestas interminables en Vallecas", explica Aláiz. Ese será el punto de inflexión para los atletas, donde los favoritos marcarán la diferencia.