Radiografía del embrollo De Gea

La pasada primavera el meta madrileño del Manchester firmó un acuerdo privado con el Madrid. Según fuentes próximas al futbolista, secundadas por responsables del club, estos pactos al margen de la FIFA son alegales pero tienen fuerza jurídica y resultan ampliamente utilizados por los clubes en este tipo de situaciones. El Madrid se comprometió ante De Gea a formalizarle un contrato hasta junio de 2021, a razón de cinco millones de euros netos por año en concepto de salario.

El club que preside Florentino Pérez garantizó al jugador que lo inscribiría, como muy tarde, en junio de 2016, fecha en la que concluye su actual vinculación con el United. Además, el Madrid se obligó a intentar ficharlo este mes de agosto. Si no cerraba el traspaso el día 20, le garantizaba un pago de diez millones brutos, y si no le fichaba el 31 le pagaba otros cinco. Esta cantidad equivale al salario de un año adelantado en concepto de indemnización por los problemas que la negociación pudiera ocasionar al futbolista en su relación con el Manchester.

De Gea, que quería vivir en la capital, suscribió la oferta del Madrid y rechazó la del Manchester, que le ofrecía el doble de sueldo: diez millones netos por temporada.

Hace un mes el Madrid trasladó su primera oferta al Manchester para obtener los derechos federativos del jugador: 15 millones de euros. El club inglés consideró que la cantidad era desproporcionadamente baja y tasó al portero en 40 millones. José Ángel Sánchez, el director general corporativo madridista, intentó persuadir a la directiva de la conveniencia de gastar los 40 millones a pesar de que el portero queda libre el próximo enero y podía fichar sin pagar traspaso en 2016. Sánchez argumentó que así se aseguraba a uno de los mejores porteros del mundo, cuyo valor de mercado oscilaba entre los 50 y los 60 millones de euros. Su posición fue rechazada por la directiva que prefirió esperar a que el Manchester bajara su pretensión.

La directiva del Madrid pasó de considerar a De Gea un refuerzo urgente para compensar la marcha de Casillas en julio, a entender en agosto que gozaría del respaldo popular (prensa y afición) si mantenía a Keylor y Casilla como dúo de guardametas. Los funcionarios del Bernabéu explicaron fuera de micrófonos las ventajas puramente económicas de la situación.

Por un lado, esto suponía ahorrarse 40 millones en un fichaje, por otro, permitía aumentar la rentabilidad de Keylor, a quien el Madrid podría vender el año que viene por 20 millones. Mientras tanto, el agente del futbolista español, Jorge Mendes, repitió a De Gea aquello que le indicó el Madrid: primero, que el Manchester se resistía a negociar, luego que Keylor se empeñaba en continuar en Chamartín, y que, en el peor de los casos, cobraría los 15 millones de indemnización prometidos y fichará en 2016.

Tanto el padre de De Gea como el propio jugador comienzan a contactar con amigos representantes que les alertan desde la semana pasada de que el Madrid ha renunciado a la operación. El lunes por la mañana, a falta de horas para el cierre del mercado, uno de estos contactos advierte al jugador sobre dos cuestiones. Primero, que el diario Marca, con excelentes contactos en la directiva madridista, había cambiado su portada del lunes, en la que daba por hecho el inminente fichaje, porque tiene la confirmación de que el traspaso es incierto. Segundo, que Jorge Mendes, que debía estar en Manchester o en Madrid apurando la transacción, se encuentra en Mónaco dedicado a otros asuntos. Molesto por las dilaciones y el posible ocultamiento de información, De Gea llama a Mendes y le dice que si el Madrid no le ficha ese mismo día entonces se planteará romper el precontrato que sellaron en primavera y aceptar la oferta de renovación del Manchester.

Mendes llama al Madrid para comunicar la postura del jugador y la directiva concluye que el fichaje de De Gea es imprescindible. Según fuentes de Gestifute, la empresa que dirige Mendes, los dirigentes creen que no hay en el mercado otro guardameta de su calidad, carisma y consideración social y no quieren arriesgarse a perderlo. Entonces, alrededor del mediodía del lunes, el Madrid se pone en contacto con el Manchester para hacer su segunda oferta: Keylor y más de 30 millones en efectivo.

El Manchester dejó en la grada a De Gea durante todo el mes de agosto, en una señal que en el mercado se interpreta como una disposición inequívoca a la negociación. La oferta del Madrid, sin embargo, no llegó. El lunes pasado los dirigentes ingleses habían dado por buenos los informes que señalaban que el Madrid se contentaba con Keylor y Casilla. Comenzaban a contar con De Gea para la temporada 2015-16.

Fuentes cercanas al gabinete de abogados del Manchester aseguran que la llamada del Madrid fue recibida con perplejidad e indignación en Old Trafford. Los ejecutivos británicos consideraron que la conducta del club español fue extemporánea y prepotente pues pretendió imponer a Keylor a última hora cuando a su director técnico, Louis van Gaal, no le interesaba el portero costarricense. Van Gaal pedía al holandés Jasper Cillessen.

Ofendidos desde el fichaje frustrado de Ramos, los negociadores del Manchester resolvieron seguir la corriente al Madrid y fingir una negociación que decidieron boicotear, según la versión que ofrece un colaborador del club inglés. Inducidos por el Madrid, los dirigentes de Old Trafford se pusieron en contacto con Keylor para duplicarle el contrato a sabiendas de que nunca le ficharán. Keylor tardó dos horas en aceptar la propuesta.

Las fuentes consultadas en el Madrid sostienen que el costarricense estaba encantado ante la nueva posibilidad. Dicen quienes participaron en los intercambios que el Manchester demoró el acuerdo pidiendo informes médicos de Keylor. Finalmente, envió el documento del traspaso, de unas cien páginas en inglés, a falta de 20 minutos para el cierre del mercado. Normalmente, según advierte un agente conectado a la transacción, hacen falta tres abogados para repasar esos documentos en un mínimo de dos horas.

Ahora el Manchester y el Madrid se esfuerzan por seducir al portero en un intento por recuperar el prestigio perdido en el enredo. El Manchester, según fuentes de Gestifute, le aumentó su oferta de renovación y le anima a quedarse esgrimiendo que el Madrid le postergó. Por su parte, y ante el temor de que De Gea rompa el acuerdo cerrado en primavera, los dirigentes del Madrid consultados señalan que estudian estimularle mediante el abono de la prima de traspaso en efectivo, esos más de 30 millones que la habrían pagado al Manchester; además de doblarle el salario neto hasta los 10 millones de euros por temporada. Esto convertiría a De Gea en el jugador mejor remunerado de la historia del Madrid después de Cristiano.