Valerón: “Si quieren que siga...”

Miguel Ángel Ramírez, presidente de Las Palmas, fue uno de los protagonistas en la fiesta del ascenso del conjunto canario. Abrazado por el central Aythami, se afeitó en el vestuario y proclamó luego a los cuatro vientos que Juan Carlos Valerón, de 40 años, seguirá una temporada más en el conjunto canario. “El fútbol nos debía una después de lo del año pasado. Valerón estará un año más con nosotros porque merece despedirse de todos los campos de Primera. Me alegro por toda esta gente que sufrió tanto la temporada pasada”, indicó el dirigente canario.

Ramírez dedicó también el ascenso a los aficionados fallecidos de su club: “Esto va por los que ya no están, que han fallecido, y estuvieron aquí en el último partido del año pasado”.

El presidente de Las Palmas ha felicitado al Real Zaragoza y le ha animado tras perder el ascenso a pocos minutos del final, así como a Valladolid y Girona, los otros dos equipos que participaron en la promoción de ascenso. “Cogí al club en Segunda División B y con 72 millones de euros de deuda, y hoy estamos en Primera y con el estadio lleno. Ya me puedo morir tranquilo”, declaró el dirigente canario, que fue aclamado por los aficionados y por todos los jugadores y cuerpo técnico de su equipo.

Valerón, que no jugó ni un minuto en este partido de vuelta de la final de la promoción, se refirió a lo expresado por el presidente. “Si el presidente dice eso, es el que manda. Yo encantado", indicó el genial centrocampista canario, muy feliz por el ascenso. Valerón dejó Las Palmas en 1997 para recalar en el Mallorca, donde estuvo una sola temporada antes de fichar por el Atlético de Madrid. Tras dos temporadas, cerradas con el descenso a Segunda de los rojiblancos, se incorporó al Deportivo, donde ganó dos Supercopas y una Copa del Rey.

“Lo más importante de todo es que hemos hecho feliz a toda esta gente, a la que le debíamos una después de todo lo que sufrieron la temporada pasada”, añadió Valerón, quien reconoció que este ascenso es la alegría más grande de su dilatada carrera deportiva. “La verdad es que sí, porque se trata del equipo de mi tierra y es mi gente la que está disfrutando de este ascenso tan especial”, añadió Valerón.

“Estaba claro que teníamos que sufrir. El año pasado era más una sorpresa que lográramos el ascenso, pero ahora teníamos cierta obligación por subir”, afirmó Paco Herrera, entrenador del conjunto canario en el que el presidente Ramírez volvió a confiar a pesar de no lograr el ascenso la pasada temporada. Miles de aficionados de Las Palmas se echaron a la calle para festejar el ascenso.

Los coches hicieron sonar sus bocinas y se escucharon fuegos artificiales por todos los rincones de la ciudad, una fiesta que comenzó en el escenario del partido, donde más de 28.000 espectadores han sido testigos directos del sexto ascenso a Primera de la Unión Deportiva, a dos meses de cumplir 66 años de historia.