El mejor fútbol sin la mejor asistencia
Los estadios de Primera congregan una media del 71% del aforo La Premier League alcanza el 95% y la Bundesliga el 92%
El aluvión futbolístico no cesa. No hay más partidos que antes, pero lo parece. Esta semana se juega la Liga todos los días. Si se consideran las competiciones europeas, desde el pasado 3 de abril hasta el 14 de mayo todos los días, menos uno, se habrá visto al menos un duelo con protagonistas de la Liga de Fútbol Profesinal (LFP). Aquel 10 de abril que no rodó la pelota podría haberse declarado como “día español sin fútbol”. En una de sus últimas comparecencias públicas le preguntaron a Javier Tebas, presidente de la LFP, si la disgregación de horarios es dañina para el negocio. Lo negó: “Llevamos un 5% más de asistencia a los estadios que la temporada pasada y vamos camino de un récord histórico, por lo tanto, no se está matando al fútbol español con los horarios de los partidos”.
La estadística muestra que la Primera española se maneja durante las últimas temporadas en el entorno de una asistencia media a los estadios de 26.000 espectadores. Influyen en los datos la presencia o no en la competición de equipos con solera y una numerosa afición como Zaragoza, Sporting o Betis, que disponen de más aforo o seguimiento que, por ejemplo, el Eibar. Los valores porcentuales, sin embargo, ayudan a entender que algo no está funcionando. Según datos de la LFP, en el total de la campaña 2009-10 todos los estadios tuvieron al menos una ocupación superior a la media entrada. Los campos de Deportivo, con el 54% de aforo ocupado, Mallorca y Almería, con el 56%, eran los que más sillas vacías mostraban. El Getafe, que entonces acabó sexto, tenía la peor media de espectadores con poco más de 11.000 por encuentro, pero llegaba a cubrir el 68% del aforo. Cinco años después, apenas supera los 7.500 en un estadio con capacidad para 17.000 personas. El Espanyol, en aquel año de su primera campaña en el nuevo coliseo de Cornellà-El Prat, cubrió siete de cada diez butacas, hoy tres de esas siete están vacías.
La comparación es también dañina para el fútbol español si se mira hacia otros campeonatos. En la Bundesliga alemana el porcentaje de asistencia a los estadios es del 92%. En la primera vuelta de este campeonato Borussia Dortmund, Bayern y Schalke llegaron casi al 100% de ocupación y solo dos de los 18 equipos en liza bajaron del 86% (Stuttgart y Hertha Berlín, que en su inmenso estadio aún así congrega cada jornada una media de 52.600 incondicionales). En Alemania la asistencia media semanal ronda los 43.000 espectadores, en Inglaterra pasa de los 36.000. En la Premier League, 11 de los 20 equipos, entre ellos todos los grandes, pasan del 97% de asistentes a sus estadios. La media es del 95%. Todos menos el Aston Villa acogen más fieles que el tercero que más congrega en España, el Córdoba (85,9%), pero incluso el 75,3% de los villanos, casi se equipara al promedio del Barcelona durante esta campaña (77,4%).
El desafío por captar aficionados se redobla en jornadas como las de estas fechas en las que los equipos se juegan sus objetivos. Proliferan las ofertas y las oportunidades para que los abonados retiren entradas a menor precio para acompañantes. En el Deportivo la directiva ha recurrido a esa estrategia durante la segunda vuelta. Una media de 4.000 abonados del equipo gallego no acude a sus partidos. Muchos horarios no facilitan la presencia de aquellos que viven fuera de la ciudad o cumplen jornada laboral. Los niños no lo tienen fácil para ir a los estadios. “¿Cómo vas a conseguir que vayan niños? Antes de la hora de empezar ya están dormidos. La liga debería pensarlo”, dijo ayer David Moyes, técnico de la Real Sociedad.
El Málaga ha jugado esta temporada ocho partidos como local a las diez de la noche. En cuanto se esbozó una queja, Tebas fue taxativo: “Los clubes cobran una cantidad importante en derechos de televisión. No deben quejarse”. Toman entonces la voz los aficionados. En Balaídos las peñas pidieron silencio durante los 12 primeros minutos del partido contra el Rayo para protestar porque el Celta había jugado 21 de 31 jornadas en lunes, viernes o más tarde de las 21.00. Solo un partido (contra el Villarreal, en octubre) se ha disputado este año en Balaídos con luz diurna. En Alemania o Inglaterra casi todos los partidos son en horario de tarde. La mejor butaca para ver a un equipo de la zona media-alta de la liga alemana como el Moenchengladbach cuesta 44 euros en un estadio con todas las comodidades. En el último Getafe-Levante, con apenas 5.954 en la grada, quienes pagaron entre 30 y 50 euros se mojaron. El fútbol español no acaba de estar orientado a su público, a una grata experiencia como usuario de un servicio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.