Bartomeu tenía “pleno conocimiento” del ‘caso Neymar’

El fiscal que investiga el caso Neymar, sobre el supuesto fraude fiscal en el fichaje del delantero brasileño, ha solicitado al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz que abra los trámites para sentar en el banquillo al presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu. En un escrito presentado esta mañana, el fiscal Jose Perals solicita al magistrado que desestime la petición del mandatario culé de que se archive la causa contra él y le pide que “dicte auto de procedimiento abreviado” (trámite equivalente al procesamiento) contra él. El fiscal atribuye a Bartomeu una defraudación fiscal de 1,91 millones de euros en 2014 por los pagos efectuados por el club al jugador en ese año y que no fueron debidamente declarados a la Hacienda Pública. En su escrito, Perals sostiene que Bartomeu “tenía pleno conocimiento” de este supuesto fraude fiscal y “autorizó las operaciones” que lo propiciaron.

El pasado 21 de febrero, la defensa del presidente blaugrana presentó un escrito en el que solicitaba el sobreseimiento libre de su cliente al entender que Bartomeu no tuvo responsabilidad en los hechos que se le atribuyen, y que estos hechos, aun cuando fueran obra de Bartomeu, no constituyen un delito tipificado en el Código Penal.

La respuesta de Perals es rotunda: “Es indudable que Josep Maria Bartomeu participó en unos hechos con indicios aparentes de criminalidad, pues a partir del 23 de enero de 2014 era el responsable máximo del FC Barcelona ante terceros, y por tanto, ostentaba su dirección y tomaba las decisiones relevantes”. El fiscal recuerda que la estrategia del presidente culé ha consistido en “delegar a terceras personas la responsabilidad” respecto a la firma de los contratos con Neymar y al pago de los tributos. “La realidad es que los pagos importantes, y el de cinco millones de euros el 30 de enero de 2014 lo era, tenían que ser autorizados por el presidente del club con su firma”. Y añade que es “más que evidente” que Bartomeu participó en toda la operación relativa al fichaje del jugador desde noviembre de 2011, como segundo del expresidente Sandro Rosell.

El fichaje de Neymar costó 94,8 millones de euros, mientras que los responsables del club aseguraron a los socios que no costó más de 57, con los impuestos incluidos. Según el fiscal, para constatar que Bartomeu era conocedor de todo el supuesto fraude se remite al acta de la junta directiva del club de 14 de mayo de 2013 en la que el propio Bartomeu propone que los fichajes para la siguiente temporada, cuando entró Neymar en el club, “no superen el montante de 70 millones de euros”. “Así pues, conocía los hechos y participó con responsabilidad plena en los mismos”, sostiene Perals.

“El motivo de la imputación [de Bartomeu] radica en que conocía los hechos cometidos por su antecesor y participó en los mismos y una vez tuvo dominio del hecho, a partir del 23 de enero de 2014, siendo presidente del club y ostentando su máxima representación, continuó cometiéndolos”.