Unicaja tumba al ‘Athletic’ croata

El Unicaja, con la notable actuación de Toolson, Will Thomas, Fran Vázquez y Kuzminskas, se estrenó con buen pie en la Euroliga. Venció por 63-78 en la cancha del Cedevita Zagreb, un equipo un tanto especial. En tiempos en los que se han extinguido las plantillas profesionales de baloncesto que puedan ser identificadas con un solo pasaporte, dos a lo sumo, aparecen dos raras avis. En la Euroliga, una competición sin restricción de nacionalidades, dos equipos emergentes apuestan por la gente de casa, como lo hace el Athletic en el fútbol. El Cedevita De Zagreb, el rival al que se enfrentó el Unicaja, es uno de ellos.

Resulta insólito que un equipo de la Euroliga esté compuesto por jugadores del mismo país, en este caso, croatas, con la única excepción del base Nemanja Gordic, de Bosnia-Herzegovina. Dirigido por el también croata Jasmin Repesa, seleccionador croata y antecesor de Joan Plaza en el banquillo del Unicaja, el Cedevita es un equipo fundado en 1991 y que no alcanzó la máxima categoría croata hasta 2002.

Pero en los tres últimos años se ha encaramado a la élite europea y esta es su segunda participación en la Euroliga después de consumar su mejor temporada y lograr el doblete, Liga y Copa, en Croacia. Se trata de un club muy ligado a los mitos del baloncesto croata. Su director general es Kresimir Novosel, hijo del legendario entrenador y presidente de la federación, Mirko Novosel, su pabellón se llama Arena Drazen Petrovic, en honor uno de los mejores jugadores europeos de todas las épocas, y su sede social se encuentra en el número 11 de la calle a la que da nombra otra estrella del baloncesto yugoslavo, Kresimir Cosic.

Repesa ha optado por algo insólito en los tiempos que corren, fichar a jugadores nacionales a costa de renunciar incluso al par de estadounidenses que formaron en el equipo la pasada temporada: Ray Allan, un base-escolta formado en la Universidad de Vilanova que llegó a firmar por los Celtics en 2006, y Nolan Smith, otro base-escolta formado en Duke y que estuvo dos temporadas en los Blazers. Prefirió fichar a jugadores croatas de una categoría contrastada como Ukic, baja ante Unicaja por lesión, o Pilepic y fichó a jóvenes promesas como Arapovic y Markus Loncar, pívots de 18 años, además de mantener a una de las perlas del equipo, el escolta Lovro Mazalin, ya titular a pesar de que solo tiene 17 años.

El fenómeno del Cedevita se ha visto acompañado por el del Neptunas Klaipeda, el equipo lituano fundado en 1962 que se estrenó en la Euroliga por primera vez en su historia con derrota, el miércoles, en la cancha del Laboral Kutxa (88-69). El Neptunas solo cuenta con un extranjero, el estadounidense Mustafa Shakur. Todos los demás, lituanos. El Cedevita y el Neptunas han roto moldes en una Euroliga en la que el Real Madrid y el Barcelona entran este viernes en acción, ante el Zalgiris Kaunas (19.30, Canal + Deportes) y el Bayern de Múnich (21.30, Canal + Deportes).