Aprilia, la quinta marca
La fábrica italiana vuelve a MotoGP en 2015, al igual que Suzuki, para animar una parrilla hoy pobre de motos oficiales
Las fábricas se han animado. Lo hizo Suzuki, que avanzó hace ya algún tiempo su intención de volver a la competición por la puerta grande y convertirse así en la cuarta marca de la categoría reina. Y lo hace ahora también Aprilia, que al igual que la casa japonesa, volverá a MotoGP el año próximo para animar la parrilla. Una parrilla, la de las últimas temporadas, pobre de motos oficiales por mucho que empresas como, precisamente, la italiana avivaran el espíritu de la competición con productos tan exitosos como aquella CRT con la que compitieron y arrasaron Aleix Espargaró y el equipo Aspar; pero aquello no era más que una suerte de subcategoría. La Aprilia del 2015 también se llamará ART pero es una evolución importante de aquella con la que MotoGP buscó ampliar sus horizontes y hacer crecer el número de pilotos en pista. La del curso que viene es una moto adaptada a las nuevas reglas (el reglamento Open, que proporciona desde este año mayores facilidades a los equipos con menos recursos) e ideada pensando en el 2016, curso en el que el reglamento experimentará una revolución para favorecer el abaratamiento de costes y, asimismo, la mayor competitividad de los equipos menos poderosos.
No les deben haber ido del todo mal las últimas pruebas –Max Biaggi estuvo rodando en julio en Mugello para trabajar con el nuevo prototipo–, pues su regreso a la categoría reina del Mundial (compitió del 2002 al 2004) estaba previsto para el 2016. “Hemos decidido debutar un año antes porque la competitividad técnica de Aprilia es de una excelencia absoluta”, señalaba el presidente del Grupo Piaggio, Roberto Colaninno. En los últimos años la casa italiana ha triunfado en el mundial de Superbike. Su asignatura pendiente, dado el éxito pasado en categorías como las extintas 125cc o 250cc, es MotoGP. Habrá que esperar unos años a ver qué son capaces de hacer.
De momento, han cerrado un contrato con el equipo Gresini (hasta ahora con motos Honda) hasta el 2018. “Estos cuatro años de acuerdo abren un nuevo capítulo en nuestra historia, la motivación por tener éxito en esta andadura es emocionante y el reto italiano es todavía mayor”, indicaba Fausto Gresini, el director de una estructura que conoce bien la categoría. Aunque el comunicado no desvela quienes serán sus pilotos, el español Álvaro Bautista seguirá con el mismo equipo y se embarcará en este proyecto con Aprilia. Su compañero podría ser Marco Melandri, actualmente piloto de Superbike con Aprilia, aunque su regreso a MotoGP todavía no está cerrado.
Lo que sí es un secreto a voces, por mucho que aún no se haya hecho una presentación oficial, es que Maverick Viñales, que debutará en la categoría reina, y Aleix Espargaró serán los pilotos del equipo Suzuki. Los otros anuncios que están al caer son, por ejemplo, el fichaje del líder de Moto3, Jack Miller, por Honda. Aunque el australiano se estrenará en un equipo satélite, su futuro está ligado a la fábrica japonesa. Como el de Héctor Barberá lo está al de Avintia, que anunció este viernes un acuerdo para correr con las Ducati open las próximas dos temporadas. Por otro lado, el anuncio del día en las categorías inferiores fue el del fichaje de Àlex Rins, ahora en Moto3, por el equipo de Sito Pons de Moto2.
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