El Madrid, en la trampa del Cholo

El Atlético ganó el pulso al Madrid en el Calderón para conquistar la Supercopa de España. Los rojiblancos volvieron a desactivar al conjunto blanco llevando el encuentro a su terreno, al dictado del plan de Simeone, que los hizo picar en su trampa. Como en la ida, el balón fue cosa del equipo de Ancelotti, que chocó una vez más contra un muro en el que trabajan todos, desde el delantero centro hasta el portero. Y si entonces el equipo rojiblanco prácticamente dobló en faltas al Madrid, ayer los blancos llegaron a superar en este capítulo a su rival. Con menos posesión, más faltas, menos remates a puerta, y sin el brillo de los protagonistas de la ida, como Kroos, Carvajal o Bale, al Madrid se le escapó la Supercopa en el Calderón.

El Madrid supera en faltas al Atlético

Mucho se habló de la pierna dura de los rojiblancos en el partido de ida. Los del Cholo, con su habitual intensidad, cometieron entonces casi el doble de faltas (20) que el Madrid (11). Ayer, sin embargo, fueron los de Ancelotti quienes realizaron más infracciones y los que vieron más amarillas (6). El Madrid hizo 19 faltas, solo una menos que los rojiblancos en el Bernabéu, y dos más que su rival en la vuelta. No hubo, sin embargo, ningún jugador que se cargara con excesivas faltas. Modric y Ramos fueron los que más veces escucharon el pitido del árbitro, en tres ocasiones. El sevillano vio la amarilla; el croata acabó expulsado por doble cartulina en el tiempo de descuento y tras una dura entrada al Cebolla Rodríguez. Raúl García y Griezmann fueron los que más faltas cometieron (4) en el bando rojiblanco. Los dos vieron la amarilla.

Los rojiblancos recuperan más

Un dato que apenas varió en los dos asaltos fue el de las recuperaciones. El Atlético (63) volvió a robar más balones que su rival (58). Tiago fue el que cazó más (11, solo cometió una falta), seguido de Raúl García (9) y Gabi (7). Tienen los de Simeone esa capacidad para esperar con calma la llegada del rival, dejar que acabe atrapado en su red y salir con potencia y balones aéreos. Aunque para el primer gol no tuvieran que esperar ni dos minutos: balón largo de Moyá, que no despejó Varane, peinó Griezmann y quedó botando en el área para que Mandzukic lo cruzara a la red de Casillas.

El conjunto de Ancelotti remató 14 veces, tres más que el equipo local, pero del total solo dos de ellos salieron de un jugador dirigidos entre los tres palos. Un tiro a puerta más que el Atlético, que además convirtió su primera oportunidad para conseguir el tanto de la victoria. En el Bernabéu, los blancos realizaron más del doble de disparos que su rival y tres veces más a puerta que su registro de ayer.

 Las figuras del Madrid, desactivadas; frenético Raúl García

El equipo no encontró al Kroos de los últimos partidos, que además fue sustituido tras el descanso. "Con los cambios perdimos el control del juego, dimos demasiados pases largos, y así el Atlético tuvo más facilidades en defensa”, reconoció el Ancelotti tras el encuentro. Kroos dejó el partido sin ver puerta (en la ida fue el que más remató) y habiendo robado solo un balón. James, como también comentó su entrenador, fue de los más agitadores. En 67 minutos disparó en tres ocasiones, las mismas que Bale (96 minutos) y Cristiano (50), y dio sensación de peligro cada vez que jugaba por dentro.

Con el Madrid desactivado, -Benzema no disparó en todo el encuentro- en el Atlético se erigió Raúl García como el jugador total. Fue el que más remató de todo el partido (5 disparos, dos a puerta), recuperó nueve balones y derrochó intensidad en el duelo que encumbró al Atlético como campeón de la Supercopa un día antes del comienzo de la Liga, cuyo título defenderá esta temporada.