Un duro ‘mordisco’ para un país de futboleros

A estas horas se ha perdido cierta mesura en la pequeña República Oriental del Uruguay y el coraje recorre a ciudadanos, hinchas, políticos, académicos, indignados por la sanción impuesta a Luís Suárez.

En las redes sociales, mensajes virulentos: insultos a la FIFA, iniciativas para que Uruguay abandone el Mundial, clamores de venganza para los próximos partidos... La foto de un puño en alto pintado con la bandera uruguaya recorre Facebook.

“El mundo contra Suárez, el mundo contra Uruguay”, escribe en su cuenta de Twitter el eminente politólogo Daniel Chasquetti; “Suárez es inmaduro y autodestructivo. Pero, ¿la FIFA hablando de "mordidas"? ¡Es un enorme cártel de delincuentes, coimeros y mafiosos!” dice el director del respetado semanario Búsqueda, Claudio Paolillo, presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).

El presidente de Uruguay, José Mujica, se reunió con su ministra de Deporte, Lilián Kechichián, para analizar la situación, después de que el Gobierno calificara la sanción de “desmedida”.

Se recuerdan pocos consensos políticos de este porte en Uruguay, y menos a cuatro meses de unas elecciones presidenciales. La presidenta del izquierdista del Frente Amplio, Mónica Xavier escribió en su cuenta de Twitter: “indignante resolución FIFA. Arriba Uruguay.Todos somos Suarez!!” y el opositor Sergio Abreu, del Partido Nacional, publicó algo parecido: “solo faltó la silla eléctrica. Una cosa es una sanción y otra una ejecución. Sres. de la FIFA: ahora Suarez somos todos ! A ganar !!”

En las calles la noticia corrió como un reguero de pólvora. Con la voz temblona, un obrero de la construcción, Oscar Méndez, se mostraba sorprendido por la dureza de la sanción que deja cuatro meses sin fútbol a Suárez,pero sobre el futuro de La Celeste no dudaba: “ahora vamos a tener que ganar, por Suárez, vamos a ganar”.

Marcela Nogueira, propietaria de una tienda de comestibles en el barrio montevideano de Malvín, expresaba su “impotencia” por la decisión pero afirmó que “no cambiará nada porque Uruguay ganará igual”.

Los hay que están preocupados por el futuro de Suárez como persona y emocinados por las lágrimas de un “padre y ciudadano ejemplar”, como expresaba el peluquero Albérico Génova, quien realista, considera que sin el delantero Uruguay lo tendrá difícil para continuar en el mundial.

Desde Brasil sólo se escucha un silencio ensordecedor: no hay reacción de Luís Suárez y se espera con ansia las declaraciones del entrenador Oscar Washington Tabárez, convertido en una especie de jefe de estado de una nación futbolera en pie de guerra, el hombre experimentado capaz de calmar los ánimos y devolver el asunto a sus justas dimensiones.

Nunca imaginaron los uruguayos ver salir a su ídolo como un paria de Brasil. De poco consuelo sirve la decisión de la Asociación de Fútbol Uruguayo, la AUF, de apelar la sentencia. Se terminó el Mundial de Suárez, quien sólo llego a jugar dos partidos después de recuperarse de una operación de menisco que tuvo en vilo a la afición durante semanas.

Una indignación líquida la de los uruguayos este jueves, de esas que La Celeste convierte en rabia para ganar. Así lo reflejaron algunas publicaciones que ni se dignaron a titular con el castigo y pasaron a la etapa siguiente: “Lo que no mata, fortalece”. La selección uruguaya saldrá a pelear los octavos de final con sed de venganza, atentos al partido contra Colombia del próximo sábado.