Madrid 2020 se deja querer

Avanzan las horas hacia el sábado 7 de septiembre, cuando está previsto que el Comité Olímpico Internacional elija en Buenos Aires a la sede de los Juegos de 2020 y la ciudad se llena de rumores. Que si Tokio se perfila como clara favorita, que si Madrid podría ganar por un puñado de votos, que si Estambul lleva las de perder... Lo cierto es que nadie, absolutamente nadie, está en condiciones de asegurar nada.

El presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco, compareció ayer por la tarde [noche en España] en conferencia de prensa junto a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y al presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González. Decenas de periodistas internacionales preguntaron de todo: dopaje, seguridad, opciones de ganar… En cuanto a esta última pregunta, Botella fue muy clara: “La carrera se gana o se pierde al llegar a la meta”. Y Blanco advirtió: “Jamás haremos una valoración de cuántos votos tenemos. Los que tiene cada candidatura se van a saber el 7 de septiembre a las cuatro de la tarde [hora local, nueve de la noche en España]”.

Cuando los delegados españoles se alejan de los micrófonos confiesan que las elecciones de las sedes olímpicas son tan inescrutables como cualquier cónclave donde se elige a un papa. Muchos delegados del Comité Olímpico Internacional escuchan a los candidatos, muchos prometen que votarán a favor, y hasta la hora de la verdad no se sabe nada.

La información más novedosa que aportaron ayer los delegados españoles fue una encuesta de 2000 entrevistas elaborada para el COE por la empresa Mediapost donde se afirma que el 91% de los españoles apoya la candidatura de Madrid. Las entrevistas se realizaron entre el 12 y el 16 de agosto. En marzo la misma encuesta revela un apoyo del 81%, diez puntos por debajo. Curiosamente, en Madrid el respaldo (83%) es menor que en el resto de España (96%). “El 88% de los españoles considera que los Juegos traerían grandes beneficios a España. El 89% cree que se mejoraría la imagen de España. Y los comprendidos entre 24 y 34 años muestran un apoyo del 94%”, informó Blanco.

En ningún momento nadie mencionó a Brasil ni las protestas que la organización del Mundial de fútbol de 2014, y la pasada Copa Confederaciones, han provocado entre cientos de miles de brasileños en los últimos meses. Tampoco se aludió a la candidatura de Estambul, donde el proyecto de obras en la plaza más céntrica de la ciudad desencadenó este año protestas multitudinarias en todo el país. Pero el dato del respaldo de un 91% de los españoles dejaba el trabajo hecho a quienes quisieran comparar. “Es una candidatura sin riesgo, que la apoyan los sindicatos y el principal partido de la oposición”, apuntó Botella.

Y de nuevo, los representantes de la delegación española volvieron a repetir su principal baza: el 80% de las infraestructuras ya se han construido y solo quedan por invertir 1.500 millones de euros en siete años a repartir entre el Ayuntamiento, la Comunidad de Madrid y el Gobierno central.

Un periodista recordó a Blanco que Japón también parece haber construido el 80% de sus obras. Pero Estambul, que solo ha edificado el 30%, podría generar todo un movimiento económico de reactivación en la ciudad y en el país. ¿Todas esas obras que quedan por hacer en Estambul son una ventaja o desventaja? Y Blanco respondió: “Si yo supiese eso sabría quién es el ganador”, contestó. “Jamás hemos hecho un estudio comparativo con las otras candidaturas. Madrid lo que ha hecho desde que se presentó en 2012 es cumplir todo lo que ha ido prometiendo. Madrid está lista y es lo que nosotros ofrecemos”.

En cuanto a la ineludible cuestión del dopaje, Blanco indicó que en los últimos años se han practicado en Madrid casi 12.000 controles. “Hemos tenido un problema que es la Operación Puerto. Pero se ha cambiado la ley y ahora mismo estamos en la línea no, sino en el primer puesto en la lucha contra el dopaje”.

Otro periodista se interesó por la seguridad. Y la alcaldesa citó una informe de la agencia Eurostat según el cual Madrid es la ciudad europea más segura, junto con Viena, tras Copenhague.

Entonces, ¿qué queda por hacer de aquí al sábado? “Trabajar 24 horas. Seguir explicando nuestro proyecto. Y, además de hablar, escuchar. Esa última opinión [de los delegados del Comité Olímpico Internacional] puede ser muy importante a la hora de elaborar nuestra presentación”, indicó Blanco. A los ensayos de la presentación del sábado se sumó ayer Pau Gasol, ya en Buenos Aires.