El Barcelona ya no gana finales

El relevo de Vilanova por Guardiola en el banquillo marcó la apuesta por una idea continuista que ilusionó en el Barça. El desafío era grande: salvaguardar el mito del equipo más ganador del lustro. Con la Liga en el bolsillo —mantiene una diferencia de 11 puntos sobre el Madrid, a falta de 15 por disputar— el conjunto azulgrana cayó en la semifinal de la Copa (frente al Madrid) y en la Champions (el miércoles ante el Bayern Múnich). No parece una mala cosecha, aunque el gran déficit del Barcelona en este curso ha sido a nivel de juego, porque el equipo no siempre estuvo a la altura de sus antecedentes.

El Barcelona esta temporada ha disputado 16 partidos de los grandes, trascendentales. Dos por la Supercopa de España ante el Madrid; cuatro decisivos de Liga: los dos clásicos y ante el Málaga en La Rosaleda (1-3) y el Atlético en el Camp Nou (4-1); cuatro por la Copa: dos de cuartos contra el equipo de Pellegrini y las semifinales frente a los de Mourinho; y los seis partidos en la fase eliminatoria de la Champions —octavos contra Milan, cuartos frente al PSG y en semifinales, el Bayern Múnich— en los que acumula cinco victorias, cinco empates y seis derrotas. De los últimos ocho, el Barça solo ganó la vuelta con el Milan (4-0). Partido pletórico cuando escaseaba la gasolina.

La temporada comenzó para el Barça cediendo el primer título. La derrota en Chamartín (2-1) dejó la Supercopa en manos del Madrid, que le dio la vuelta al resultado de la ida (3-2).

El arranque en Liga transitó de récord en récord. Terminó la primera vuelta en casa del Málaga con un categórico (1-3) y alcanzó un total de 55 puntos de 57 posibles. El equipo, que atenazaba a los rivales inferiores a fuerza de goles, mostraba fragilidades defensivas. El Madrid le pilló el truco al equipo de Vilanova, que solo ganó la ida de la Supercopa en el Camp Nou. Una primicia, porque en la era Guardiola, el Madrid solo pudo festejar la victoria ante el Barça una vez: la final de la Copa en 2011 (1-0). Esta temporada se enfrentaron en seis oportunidades. Y los clásicos dejaron un saldo indiscutible: una victoria, dos empates y tres derrotas, 12 goles encajados y 9 a favor

El golpe más duro lo dio el Bayern: 7-0 (4-0 en Múnich y 0-3 en el feudo azulgrana). El Barça no caía en el Camp Nou en Champions desde el 20 de octubre del 2009 (1-2). Atrás quedó otro registro: seis semifinales de Liga de Campeones consecutivas, que para lograrlo el Barça tuvo que forzar demasiado la maquinaria. De los seis partidos en su estadio solo ganó uno: 1-0 al Inter.

El Barça pasó las de caín contra el Milan tras perder 2-0 en San Siro, lo que apelaba a la épica. Se logró una remontada histórica. Contra el PSG, el Barça pasó la eliminatoria sin conocer la victoria (2-2 en la ida y 1-1 en la vuelta), pero perdió a Messi, que se fue lesionado del Parque de los Príncipes y dejó al Barça cojo. Cojo en ilusión y cojo en las grandes citas. Hasta que le tumbó el Bayern con un 7-0 que pone la idea en duda.