El Madrid reta al Barça a la primera

Barcelona y Madrid se citan esta tarde en Zaragoza (19.00, TVE-1 y Autonómicas), a las primeras de cambio, por el título que inaugura la temporada: la Supercopa. Los dos grandes, que dirimieron un apasionante final de Liga, se retarán menos de tres meses después en un pulso que están condenados a repetir varias veces este año por historia, galones y presupuestos.

Llegaba el Madrid a su estreno en competición oficial con un expediente de pretemporada impoluto. Seis victorias en otros tantos partidos. Un rodaje prometedor en el que los blancos refrendaron muchas de las virtudes del curso pasado y dejaron entrever las bondades de sus nuevas piezas. Pequeños retoques con los que acentuar un estilo vertiginoso. Draper: un base para ajustar defensas y dar una vuelta de tuerca al impulso en la sala de máquinas; Slaugther: músculo y fibra para aportar tensión e intimidación en la pintura, en una réplica de Ibaka y Rudy: la bandera del proyecto. Con todos ellos y la notable aportación de Mirotic (14 puntos y 11 rebotes para un 23 de valoración) se deshizo del CAI Zaragoza, aprovechando que el conjunto de Abós no acaba de encontrarse tras remodelar media plantilla.

El Anfitrión saltó a la cancha con la intención de sorprender a sus rivales y capitaneados por un brillante Roll y un intenso Aguilar logró las primeras ventajas. Sergio Llull tomó entonces la responsabilidad ofensiva de los blancos que dieron la vuelta al marcador. Mirotic cerró el rebote y ayudó también a que el Madrid terminara el primer cuarto con cuatro puntos de ventaja (17-21).

Mirotic mantuvo a los suyos por delante en el segundo cuarto y contribuyó de forma decisiva a que los de Laso incrementaran su ventaja (28-34, min.17), pero la pelea y la intensidad defensiva de los zaragozanos les permitió quedarse a cinco puntos al descanso (31-36).

Tras la reanudación, el Madrid subió la intensidad y rompió el partido. Un mate de Rudy Fernández y una canasta de Sergio Rodríguez puso a los de Laso once puntos arriba (33-44, min 25). El 'Chacho' destapó el tarro de las esencias y dirigió con maestría la escapada madridista. Mientras, los de José Luis Abós comenzaron a acusar el cansancio.

La defensa blanca apagó las escasas luces ofensivas del CAI y el ataque ya había alcanzado la velocidad de crucero. De esta forma, con un parcial de 9-22 en el tercer cuarto, la segunda semifinal quedó sentenciada a falta del último parcial (40-58).

El cuarto final fue un mero trámite en el que los dos equipos se lo tomaron con calma. Tuvo de nuevo algunos minutos el canterano Guillermo Hernangómez, de 18 años, quien se postula como el cuarto pívot de la plantilla blanca, al menos hasta la llegada de un fichaje para el juego interior.

La exigencia será notablemente superior en el segundo partido oficial de la temporada. Otra final ante el Barcelona en lo que supone la reedición de la final de Liga y de la Copa del Rey. Los de Laso buscarán su primera Supercopa mientras que los azulgrana intentarán revalidar un título que han conquistado en las últimas tres ediciones.