El mensaje de la plata
La medalla de Mireia demuestra que subirse al podio es posible

La plata de Mireia es histórica. Es lo suficientemente importante como para poder empujar a los chavales jóvenes del equipo español, incluso a los que están compitiendo en estos momentos en los Juegos. El mensaje es simple: ganar una medalla en natación es posible.
Aunque parezcan dispares, el 800 libre y los 400 y los 200 estilos son pruebas complementarias en los entrenamientos. Pero pocos nadadores tienen el coraje de afrontarlas todas en unos Juegos como hace Mireia. Ojalá en los Juegos de Río, en 2016, ella pueda nadar todas estas pruebas como nadó el 200 mariposa en Londres. Fue emocionante verla romper la carrera. Hizo como los ciclistas, o como los atletas. Se escapó, y cuando las estadounidenses quisieron reaccionar ya era demasiado tarde.
La braza y la mariposa son estilos abrasivos
Yo nadé el 200 mariposa y puedo decir que, o estás fino y tácticamente lo haces bien, o te equivocas y es una prueba terrible. Si no sales relajado, esos últimos 50 metros pueden ser eternos. Es como en la braza, que es otra modalidad muy técnica, en la que hay que hacer movimientos antinaturales. En el crol giras sobre el eje de tu estómago y en la espalda también. La braza y la mariposa son estilos abrasivos en los que hay que levantar los brazos a la vez que conectas dos patadas y usas el tronco para impulsarte.
Lo fundamental en la mariposa y en la braza es mantener el centro de gravedad lo más arriba posible. Es difícil. Si te cansas y levantas demasiado la cabeza para respirar bajas la cadera y pierdes el contacto con la superficie. Te clavas. En la mariposa vemos continuamente nadadores que acaban nadando verticales cuando lo que tienen que hacer es mantener la línea recta. O tienes un buen estilo, o es imposible ser competitivo como lo fue Mireia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
Últimas noticias
PP y Vox suprimen la comisión LGTBI al reformar el reglamento de Les Corts Valencianes
El otro gran caso de empleo a cambio de sexo en una Diputación gallega: del amparo total a Baltar a la dimisión de Tomé
El proyecto de una fábrica de componentes de baterías en Sallent con 285 millones de inversión decae tras una decisión de Trump
Salvador Illa asegura que “hoy nada permite concluir” que la peste porcina proceda de un laboratorio
Lo más visto
- Elon Musk, más cerca de ser el primer hombre en alcanzar una fortuna de un billón de dólares
- El Gobierno de Mazón pagó 107 millones de euros más a Ribera Salud al aumentar su aportación por ciudadano
- La población de pumas de la Patagonia se dispara gracias a una presa inesperada: los pingüinos
- El Supremo ordena al ex fiscal general el pago de la multa y la indemnización a la pareja de Ayuso que le impuso al condenarle
- Víctor Manuel, músico: “El capital tiene que rectificar, nunca pensé que fueran a ser tan voraces”




























































