Mario, el último legado de Belenguer
El central canario, que jugó en el Barcelona, ficha por el Betis tras superar unas exigentes pruebas médicas y gracias a los informes de su ex compañero en el Getafe
El mundo se le vino encima a Mario Álvarez (Los Realejos, Tenerife; 1982) el pasado 30 de septiembre cuando se partió el tendón de Aquiles de su pierna derecha en un partido de Liga Europa con el Getafe ante el Young Boys. Las lesiones siempre han perseguido a este defensa central agresivo y de buena anticipación, que incluso fichó por el Barcelona en el verano de 2003 en una operación algo extraña, pues llegó cedido del Valladolid y solo jugó un partido de Liga a las órdenes de Frank Rijkaard. El paso del tiempo ha curtido a este zaguero, que ha superado su gravísima lesión hasta el punto de disputar los tres últimos partidos de Liga con el Getafe, donde el club madrileño se jugaba la vida. Ahora, Mario ha firmado por el Betis un contrato por un año con opción a otro si juega un determinado número de partidos.
El canario se mantiene en la élite gracias a dos factores fundamentales. El primero, que el Betis, en plena Ley Concursal y con una deuda de 84 millones de euros, está tieso y solo puede fichar a jugadores que lleguen libres y con una ficha a bajo coste, caso de Mario. El segundo, los excelentes informes que ha dejado David Belenguer sobre Mario, con el que compartió tres temporadas en el Getafe, de 2007 a 2010. Al primero que se dirigió la dirección deportiva bética, comandada por el ex futbolista Vlada Stosic, fue a Belenguer, quien recomendó sin dudarlo el fichaje de Mario a los dirigentes. El zaguero catalán es muy respetado en el Betis y su carisma trasciende del vestuario. El segundo paso fue la conexión entre los jugadores. "Hablé con Mario y le dije que ni se lo pensara. Viene a un club grande, con una enorme afición y con ganas de volver a hacer cosas importantes. Es, además, un excelente compañero", afirmó el propio Belenguer, en una rueda de prensa en la que anunció que no seguía en el club andaluz pero sí jugando al fútbol, a pesar de sus 38 años. Fue su último legado verdiblanco. "Belenguer me aconsejó que fichara por el Betis. Me ha dicho que todo en este club es bueno, de lujo", destacó Mario nada más hacerse oficial su llegada a la entidad verdiblanca. A pesar de los buenos consejos de Belenguer y de no haber tenido que pagar un euro en concepto de traspaso, en el Betis mantenían dudas acerca del estado físico de Mario. Por esta circunstancia, el jugador ha sido sometido a dos días de intensas revisiones médicas. En ellas se ha comprobado que el tendón de su pierna derecha está perfectamente operado y, sobre todo, se ha analizado con lupa el estado del tendón de Aquiles de su pie izquierdo. Los deportistas que se rompen uno de esos tendones tienen un 50% de posibilidades de romperse el otro si mantienen una férrea actividad deportiva. Los servicios médicos del Betis han dado el visto bueno. Además, el remate en la negociación ha sido que Mario ha aceptado un fijo de ficha relativamente corto para la Primera División, sujeto, eso sí, a aumentarse de forma considerable si disputa una serie de partidos.
Curiosamente, la aportación de Mario en el Getafe fue aumentado a medida que disminuía la de Belenguer, aunque en la última temporada que jugaron juntos en el conjunto madrileño disputaron cada uno en Liga en el mismo número de partidos, 13. El defensa canario, que ha militado en el Atlético de Madrid B, Valladolid, Barcelona, Recreativo de Huelva y Getafe, tiene en el Betis la oportunidad de llenar el gran hueco dejado por su compañero en el club sevillano. La mejor forma de agradecerle sus buenos consejos.
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