Gattuso pierde los nervios

Una lluvia fina ha acompañado esta noche en San Siro la ida de los octavos de la Liga de Campeones entre Milan y Tottenham, un partido aburrido que ha decidido un contragolpe bien trabado por los ingleses a 10 minutos del final, que se han aprovechado del único momento del partido en el que el Milan ha intentado presionar más arriba para romper un empate que a mediados de la segunda parte parecía cantado. Crouch ha recibido la pelota de Lennon, después de que este superara en velocidad a Yepes, y completamente solo ha castigado a Amelia.

Si el larguirucho delantero, que en esta competición ya ha anotado cuatro goles, ha sido el protagonista positivo del partido, Gattuso, el capitán del Milan, ha sido el negativo. Durante la segunda mitad se ha encarado con el segundo entrenador del Tottenham, Joe Jordan, poniéndole una mano en la cara, se ha merecido una amarilla que no le permitirá disputar la vuelta y después del pitido final se ha ido, desnudo de la cintura para arriba, a buscar una pelea con el banquillo inglés. Entonces le ha dado un cabezazo al mismo Jordan. La UEFA ya le ha abierto un expediente disciplinario, pese a que el futbolista ha perdido perdón por su comportamiento. "Perdí la cabeza y asumo toda la responsabilidad porque hice algo que no debía. Jordan me molestó durante todo el segundo tiempo pero eso no justifica mi reacción. Me equivoqué al hacer lo que hice con una persona mayor que yo", ha admitido.

Antes de que todo esto pasara, los espectadores tuvieron que soportar un primer tiempo soporífero, con el marcador bloqueado, sin emociones y bajo la lluvia. Toda una depresión para los asistentes que habían dejado de bostezar solo en el minuto 18, para asegurarse de las condiciones de Abbiati, que en una salida aérea había recibido un fortuito golpe en la cabeza. El portero del Milan ha tenido que salir del campo en camilla y en su lugar ha entrado Amelia.

En los primeros quince minutos de la segunda parte el partido se ha animado un poco; Gomes ha salvado dos veces a su equipo oponiéndose a dos cabezazos del defensa colombiano Yepes y Van der Vaart ha rozado el palo con un disparo venenoso desde fuera del área milanista. Cuando el Milan, un poco alentado por la salida al campo de Pato por un Seedorf apagado, ha intentado apretar un poco, ha llegado el contragolpe letal culminado por Crouch. En el último minuto Ibrahimovic ha marcado un gol que ha sido anulado por un empujón previo del sueco al defensa que le marcaba. Allí ha empezado el bochornoso espectáculo de Gattuso.