"La Copa nos ha hecho daño"

José Mourinho empezó a mirar el reloj en el minuto 64. No consiguió quitar ojo a la hora hasta el minuto 81 cuando marcó Özil. Hasta ese momento movía los brazos como si con ellos pudiese desplazar a sus jugadores desde la zona técnica. O hacerlos correr más rápido. El gol de Özil, en el 81, puso fin a la tensión del técnico portugués que irrumpió en sala de prensa con unas vistosas ojeras. También puso fin al gafe del Madrid con la Copa. Los blancos vuelven a disputar una final siete años después.

Será contra el Barcelona. ¿Le tienen muchas ganas?, le preguntaron a Mourinho. "No. Muchas no. Normales. De lo que tenemos ganas es de jugar una final. Además la historia dice que no hay favoritos, que siempre ganan los que llegan peor", contestó el portugués sabedor de que los azulgrana marchan a siete puntos en la Liga. "Pero hay que olvidarse de la Copa ya que nos ha hecho daño. Nos ha costado mucho: hemos disputado nueve partidos en total en enero y han pasado factura [el Barça ha jugado los mismos]. En años anteriores se jugaban dos partidos y para casa, este año no", aclaró Mourinho refiriéndose a las eliminaciones coperas de Pellegrini, Schuster, Capello y compañía. "Este año hemos querido mirar esta competición de una forma muy seria y recuperar el prestigio", prosiguió. "Somos el equipo que, por el trayecto hecho hasta ahora, se merece verdaderamente jugar la final", ha remachado.

La celebración por haber conseguido alcanzar la final le duró al técnico del Madrid dos minutos. Enseguida se quejó de la fecha elegida para disputarla: el 20 de abril. "Mediados de abril es una fecha un poco extraña porque todos esperamos, tanto nosotros como el Barça, hacer las cosas bien en Champions y llegar lejos. Resulta que, si todo sale bien, nos encontraremos en el medio con una final... mientras los demás equipos europeos podrán preparar con tranquilidad la Liga de Campeones", explicó el portugués.

El martes Mourinho achacó los malos resultados del Madrid en Liga a que sus jugadores no están acostumbrados a jugar cada tres días. Contra el Sevilla, sin embargo, tardó 83 y 87 minutos en hacer los primeros cambios. Entraron Adebayor y Granero. Pedro León, Canales y Gago ni siquiera estaban convocados. ¿Se queja del cansancio pero nunca pone a los jóvenes, no cree en ellos?, le preguntaron al técnico. "Ya lo dije en Auxerre y se me malinterpretó. No puedo esperar que niños jóvenes que llegan de clubes de otras dimensiones y con otras intensidades competitivas lleguen aquí y con un clic estén a tope. Son circunstancias normales. Es más fácil ser periodista que entrenador. Si roto es porque roto, si no, es porque no roto", contestó.

Igual que Jorge Valdano restó importancia a la sequía goleadora que sufre Cristiano. El portugués lleva cuatro partidos seguidos sin marcar. "Lo que pasa es que estamos acostumbrados a que meta más goles. Él con su presencia le da un estímulo muy grande al equipo y ayuda a abrir los partidos. Físicamente siempre está a tope, pero en el fútbol también existe el cansancio mental, él no es de los jugadores a los que les gusta descansar. No hagamos una crónica de Cristiano Ronaldo porque no marca goles, ha marcado más que nadie en la historia del club desde que llegó", comentó el director general. Mourinho también defendió al portugués. Primero atacando a Pandiani por sus declaraciones [dijo que a CR le falta un tornillo] -"Pandiani debería pagar algo porque ha conseguido hacerse publicidad hablando de CR"- y luego alabando su aportación al equipo. "Cristiano una vez más ha trabajado muchísimo para el equipo. No ha marcado, no pasa nada, tiene mi confianza y el cariño de sus compañeros", concluyó el entrenador.