"Los africanos aún deben esperar"

Finidi George (Port Harcourt, Nigeria, 39 años) jugó el Argentina-Nigeria, choque en el que Maradona disputó en 1994 su último encuentro mundialista. Afincado en Mallorca, se dedica a vivir la vida y ver mucho fútbol. Jugó en el Betis y el Mallorca.

Pregunta. Jugó dos Mundiales con la mejor Nigeria de la historia. ¿Qué recuerdos tiene?

Respuesta. Los recuerdos, en general, son buenos, aunque ocurrieron cosas que no debieron y la mejor Nigeria de todos los tiempos no pasó de los octavos.

P. ¿Qué tipo de cosas?

R. A nosotros nos falló la concentración, algo imperdonable. En el Mundial de Estados Unidos ganábamos 1-0 a Italia y en el minuto 87 perdemos un balón y nos empatan. Eso no puede ocurrir.

Los defectos de concentración han ido lastrando el papel de las selecciones africanas en los Mundiales

Nigeria no es un equipo comparable con el de mi época, que tenía mucha más calidad. Lo seguí en la Copa de África, en enero, y ya mostraron sus carencias

P. Sobre todo cuando el que coge el balón es Roberto Baggio.

R. Gran jugador, sin duda. Tenía calidad y velocidad, pero repito que se lo pusimos en bandeja. Son esos defectos de concentración los que han ido lastrando el papel de las selecciones africanas en los Mundiales.

P. ¿Y qué ocurrió en Francia 98? Venían de ganar a España, que no pasó de la primera fase.

P. Marcó Raúl, recuerdo, y falló Zubizarreta. Quizás fue lo peor que nos pudo pasar. Le ganamos a una selección importante y pensamos que todo iba a ser muy fácil a partir de ahí. Llegó Dinamarca y nos metió cuatro. Nos lo creímos antes de tiempo.

P. Tenían un buen equipo.

R. Recuerdo a gente como Amokachi, Oliseh, Ikpeba, Yekini... Un equipo sólido, que pudo hacer grandes cosas.

P. Y un portero que era príncipe, Rufai.

R. Sí, sí. Estuvo en los dos Mundiales conmigo. Quizás no era de lo mejor que teníamos.

P. En ese Mundial de 1994, Nigeria jugó contra Argentina. Fue el último partido de Maradona en un Mundial.

R. Era un Maradona en el final de su carrera, pero todavía determinante. Nosotros lo hicimos bien, porque le marcamos en zona y la cosa funcionó. Apenas nos creó peligro, aunque demostró su calidad en una falta que sacó muy rápido para que marcara Caniggia. Fue el segundo gol, el del triunfo de Argentina. Ninguno de nosotros se puso delante del balón en esa falta y nos ganaron. Diego se movía como Messi, por toda la delantera, pero no resultaba tan brillante como en su juventud.

P. Ya que su Nigeria no pudo dar el salto de calidad, igual este es el Mundial de los equipos africanos.

R. Lo dudo mucho. Creo que los equipos africanos deben aún esperar. No acabamos de saber competir. Quizás Sudáfrica y Costa de Marfil sean los que puedan llegar más lejos.

P. ¿No apuesta por Nigeria?

R. No creo que pase de la primera fase. No es un equipo comparable con el de mi época, que tenía mucha más calidad. Lo seguí en la Copa de África, en enero, y ya mostraron sus carencias. No se han dado muchos cambios desde entonces hasta aquí, así que lo tendrán muy complicado.

P. ¿Y cuál cree que es el problema?

R. La mayoría de los futbolistas de Nigeria no han jugado con asiduidad en sus equipos de origen. Así es difícil llegar lejos en un Mundial.

P. No hay, por tanto, ningún equipo africano entre sus favoritos para alzarse con el Mundial.

R. No. Lógicamente, le deseo lo mejor a Nigeria, pero mi segunda selección y gran favorita al título es España. No obstante, debe ir con mucha cautela. Francia llegó al Mundial 2002 como campeona de Europa y se fue a casa en la primera fase.

P. ¿Cómo ve a Brasil?

R. En la línea que le imprime Dunga. Es un equipo sólido, defiende bien y juega al contragolpe. Otro equipo importante es Inglaterra y también hay que tener en cuenta a Italia. Se crecen cuando nadie habla de ellos.

P. Usted conoce a Luis Aragonés de su etapa en el Mallorca. ¿Qué le dio a la selección?

R. Es un ganador y supo transmitirle ese espíritu. Le dio a España una mentalidad ganadora y eso ha provocado que ahora los jugadores crean en la victoria. Del Bosque ha dado continuidad a ese trabajo con buen criterio.