La codicia de Murray, el empuje de Ballesteros y el fútbol internacional copan las portadas

The Guardian: Rooney, como Raúl

Los compromisos internacionales de Inglaterra acaparan casi toda la atención en la sección de deportes del diario británico, pero éste no se olvida tampoco del nuevo paso de Andy Murray hacia la tercera plaza de la ATP. La victoria ante Troicki le sigue acercando a la posición que ocupa su rival Novak Djokovic. Al serbio le vale con terminar una ronda por detrás del escocés par ano perder su número tres. La falta de confianza del centroeuropeo podía ser una baza para Murray. Ahora, jugará (Djokovic) con Tsonga, mientras Rosberg, piloto de Williams, critica el horario del gran premio de Malaisia, se revela la mano negra de Abramóvich en la destitución de Scolari como técnico del Chelsea londinense e Inglaterra trabaja para acabar con los despistes en su defensa. Jugarán contra Ucrania, la selección de Shechenko, y Capello no quiere sorpresas. Confía en Rooney como confiaría en Raúl, argumenta el diario, por ''su movimiento, su pasión y su liderazgo''.

Times: Tiembla, Djokovic

La supremacía de Murray sobre Troicki, verdugo de Nalbandián en el Masters de Miami, quiere verla repetida el diario en su partido de cuartos frente a Fernando Verdasco. Si gana el título, el rotativo asegura que derrocará a Djokovic de su tercer puesto en el ranking. La entrevista que Olga Viza hizo ayer a Severiano Ballesteros atrae la atención del periódico, y con una gran foto del ex golfista y un titular esperanzador la transcribe Graham Keely. ''Es mi sueño recuperar la normalidad y luego diseñar un club de golf infalible''. Ánimos no le faltan al gran campeón español pese a su enfermedad. Pero como vuelven los partidos internacionales (Inglaterra-Ucrania), nada mejor que una comparación de equipos y jugadores. Terry tendrá que frenar a Shevchenko, y Hamilton, esperar las evoluciones de su McLaren. ''La gente espera cambios de la noche a la mañana, pero no va a ocurrir este fin de semana''.

Clarín: accidentada llegada

Al otro lado del océano, en Argentina, además de los lamentos por la muerte del político Raúl Alfonsín, el diario destaca la accidentada llegada de la albiceleste a la concentración. Dentro de un microbús llegaron dos de los más grandes jugadores del mundo, y eso despertó el fervor. Fue tanto, que la expedición tardó una hora más en acceder al hotel. Además, a un policía se le escapó una bomba de gas lacrimóngeno. Pero además de Messi y Agüero está Mascherano, el referente de la afición. Pero no todo es fútbol. En deportes de raqueta, Argentina sobrevive en Miami gracias a Juan Martín Del Potro. ''Con un tenis de alto vuelo, venció por 6-3 y 6-2 al español David Ferrer (12° del mundo). Ahora se enfrentará otra vez a Nadal por un lugar en las semis del Masters 1000''.