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FÚTBOL | DEPORTIVO 0-SPORTING 3

El Sporting se pasea

Primer triunfo en Riazor del cuadro gijonés ante un flojo Deportivo

El Sporting nunca había ganado en Riazor en los 14 partidos de Liga que llevaba disputados. Ayer ninguneó al Deportivo, volteó los presagios estadísticos y engarzó su tercer triunfo consecutivo. Ganó por 0-3, pero pudo conseguir una goleada de escándalo. "Cuando un portero recibe tres goles y es el mejor de su equipo, queda todo dicho", resumió Manuel Preciado, su técnico, al terminar el paseo.

El Sporting es un bloque que sabe correr y lo hace a destajo. El Deportivo, sobre el papel, posee una enorme fortaleza defensiva. Pero en dos partidos su solidez ha quedado bajo sospecha. Aranzubía recibió tres goles en Moscú. Se trataba del CSKA y había una excusa a la que agarrarse. Ayer se los metió el Sporting, un equipo sin grandes nombres, pero que no ahorra una carrera para creer en la permanencia.

Deportivo 0 - Sporting 3

Deportivo de La Coruña : Aranzubia; Manuel Pablo, Lopo, Colotto, Filipe Luis; Sergio (Juan Rodríguez; m.73), De Guzmán; Pablo Álvarez (Valerón; m.38), Lafita, Guardado; y Riki (Mista; m.73).

Sporting de Gijón : Cuéllar; Sastre, Gerard, Neru, Canella; Camacho, Míchel; Luis Morán, Carmelo (Bilic; m.67), Diego Castro (Omar; m.88); y David Barral (Matabuena; m.81).

Goles : 0-1; m.23, Barral de penalti. 0-2; m.26, Carmelo. 0-3; m.83, Diego Castro.

Árbitro : Teixeira Vitienes (Colegio cántabro). Expulsó al defensa del Deportivo de La Coruña Colotto (m.44) con roja directa. Además, mostró tarjeta amarilla a Neru (m.37), Camacho (m.40) y Míchel (m.73), por el Sporting de Gijón; y a Aranzubia (m.44) y Lopo (m.72), por el Deportivo.

Incidencias : Encuentro correspondiente a la octava jornada de Primera División disputado en el estadio municipal de Riazor ante unos 22.000 espectadores, más de 4.000 seguidores del Sporting de Gijón. Antes del partido, en los aledaños del estadio, se produjeron altercados entre ambas aficiones y fue necesaria la intervención policial.

La mareona, en la que se enrolaron unos 6.000 aficionados, se marchó de Riazor celebrando el triunfo y los datos positivos. Acabó con su portería a cero a pesar de ser la defensa más castigada de Primera con 21 goles en contra. Le resultó sencillo. El Sporting se enfrentaba a un Depor que sólo ha marcado cinco goles en lo que va Liga y cuyos delanteros llevan más de 1.000 minutos sin darse una alegría. El único que ha levantado los brazos es Mista y ocurrió en la Primera jornada de Liga contra el Madrid.

Miguel Ángel Lotina, obsesionado con las rotaciones, presentó un once con cinco caras nuevas respecto al revés de la Uefa. La pinta era excelente. Colotto regresaba al centro de la zaga, Pablo Álvarez, Lafita y Guardado ofrecían movilidad en ataque para conectar con Riki y Sergio parece más solvente que Antonio Tomás a la hora de construir.

Arrancó bien el partido para el Deportivo. Su tridente merodeaba por el área de Cuéllar, aunque no encontraba una rendija. Lo hizo Lafita con un gran pase a Guardado. La oportunidad malograda fue un mal presagio. Era el minuto 19. Cinco después, una contra bien llevada por Luis Morán le llegó en el punto de penalti a David Barral, que suplía a Bilic. Barral disparó a la primera, Aranzubía detuvo con apuros y Lopo cometió penalti. Lo transformó el propio Barral. El Deportivo quedó noqueado. Tres minutos más tarde, Carmelo sentenció.

Lotina encontró la disculpa al desastre en la expulsión de Colotto por empujar a Barral cuando corría con pocas cartas para llegar a un autopase. "El Sporting cae simpático y el árbitro le ha favorecido", redundó en la excusa. Diego Castro sumó al marcador el tercer gol tras una pared con Camacho. Y Aranzubía fue el mejor. "Queda todo dicho", como explicó Preciado. "Hace falta correr bien", añadió. El Deportivo no lo sabe.

Carmelo celebra su gol
Carmelo celebra su golREUTERS

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