Joaquín: "Mi relación con Aragonés es de amor-odio"

Joaquín Sánchez, futbolista internacional del Valencia, afronta una nueva temporada con el deseo de lograr títulos. Pero el primer objetivo es certificar el paso a "una Eurocopa" que "sin España sería muy fea".

Joaquín siempre es sincero cuando habla. Y de ello ha hecho gala al nombrar su relación con el seleccionador nacional, Luis Aragonés, de amor-odio. "Siempre hemos tenido una amistad grande y hemos atravesado problemas, pero él fue futbolista y me entiende. No hubo dificultad para hablar y aclarar todo. Estar con la selección ya demuestra que su confianza es total. Han cambiado las cosas desde lo que pasó (una polémica tras decir Joaquín que la selección era un "despelote"). Estar fuera fue un cambio importante y uno necesita saber que vuelven a contar con él. Luis no tuvo ningún problema en volverme a convocar cuando sabía que estaba bien y ahora mismo la confianza es plena. Espero dar mucho a la selección".

El valencianista recuerda el partido contra Irlanda del Norte, su último con la 'roja' antes de decir que el vestuario de la selección era un "despelote". "Hice mis declaraciones y no volví. Fue un trago difícil porque desde que empecé siempre he tenido una ilusión tremenda por vestirme con la camiseta de la selección. La siento. Por eso volver fue un nuevo debut. Los años pasan es más complicado seguir. Es un premio". Al que, sin duda, dejó marcado aquel partido contra Irlanda del Norte fue a Raúl. Fue el último partido en el que el capitán blanco vistió la camiseta de España. Su compañero Joaquín no ha dudado en alabar al madridista, "para mí Raúl siempre ha sido un espejo donde fijarte como futbolista y como persona. Ha hecho cosas importantes para volver pero es Luis quien tiene que decirlo. Ahora está en buen momento, ha declarado que quiere volver y creo que por este camino debe estar aquí por muchos motivos. Es la bandera de la selección y queda feo que se quede fuera tras una derrota que te deja señalado. En fútbol a veces llegan cosas malas pero trabajando, con la conciencia tranquila todo puede volver a dar la vuelta, como me ocurrió a mí".

Sin margen de error

Joaquín ha analizado los dos próximos rivales de España, Islandia y Letonia. "Son dos partidos que hay que ganar. Lo sabemos y el seleccionador nos está mentalizando. Sabemos lo que nos jugamos y estamos acostumbrados a escuchar nombres como Islandia o Letonia que no nos hacen relajarnos. Salimos al campo con la misma motivación. Representamos a un país y nos jugamos la Eurocopa". Para el andaluz Islandia es "una selección que su fuerte no es la calidad. Nos encontraremos un equipo cerrado, duro y difícil que no va a regalar caramelos, todo lo contrario. Las patadas que lleguen no nos deben importar para hacer nuestro juego". Y se les puede ganar "jugando por las bandas. El fútbol actual más peligroso es por banda. Debemos aprovecharnos del toque y la calidad de nuestro centro del campo para jugar por los laterales, abrir al rival y que dejen espacios. Con el balón para nosotros tenemos muchas opciones", concluye Joaquín.