La Real se queda sin milagro

La Real Sociedad se quedó sin el milagro de la permanencia y descendió a Segunda División, tras cuatro décadas en Primera, pese a empatar en Mestalla en un partido con muchos goles pero con el fútbol justo, en el que dos tantos en propia meta fueron la puntilla para los donostiarras. Al final, el tercer gol de la Real Sociedad, conseguido también en propia meta en el quinto minuto de la prolongación, únicamente sirvió para que el encuentro acabara con un empate insuficiente para todos.

El Valencia acusó el desgaste de toda la temporada, le faltaron ideas y malogró la mayoría de las numerosas ocasiones de que dispuso para haber ganado el encuentro incluso con holgura, pero la falta de fuerzas del equipo local hizo imposible una despedida brillante ante su público. La Real Sociedad estuvo viva, mientras los resultados de los restantes partidos ofrecían una cierta incertidumbre, pero cuando se clarificaron otros encuentros a la Real ya no le quedó ni ilusión para tratar de ganar el encuentro.

El primer tiempo tuvo muy poco fútbol y muchos goles, ya que las imprecisiones fueron las protagonistas de un partido de nervios entre el equipo donostiarra que necesitaba ganar y el Valencia con las urgencias de ofrecer una buena imagen en su despedida de la temporada. A los dos minutos, una imprecisión en el saque de un córner permitió que Garitano pusiera un esperanzador 0-1 en el marcador para su equipo que fue neutralizado por Villa, a los cinco minutos, en una jugada personal.El Valencia, pese a ello, no se centró y la Real Sociedad, con poco más que el envío de balones bombeados al área, pudo volver a adelantarse en el marcador, en un par de barullos en el área local, uno de ellas resuelto con un balón al poste.

Intercambio de depropósitos

En un partido de despropósitos, el 2-1 fue conseguido, cuando peor imagen daba el Valencia, por el central argentino Víctor López en propia meta. Fue a partir de entonces cuando la Real Sociedad pareció abandonarse a la adversidad del resultado, lo que no impidió que en un balón en el que el escaso público congregado en Mestalla pidió fuera de juego, Díaz de Cerio, en un gran remate pusiera en el tanteador el empate a dos con el que se llegó a descanso. Poco cambió el panorama del encuentro tras el descanso sobre todo por lo que respecta a la calidad del juego, aunque las contras del Valencia fueron más peligrosas y, en alguna de ellas, el marcador pudo haberse puesto de nuevo a favor del equipo local.

La Real Sociedad generó casi todo su peligro en córner y faltas botadas casi siempre por el brasileño Savio Bortolini, aunque cuando el segundo tiempo llegó a su ecuador, las ocasiones del equipo local empezaron a ser tan frecuentes como desprovechadas por sus jugadores. El partido, completamente roto, se había convertido en un querer y no poder por parte de ambos conjuntos, que lo tenían todo hecho, en el caso del Valencia desde el principio, y en el de la Real Sociedad en función de los marcadores que se daban en otros campos a esas horas del encuentro, cuando su descenso ya estaba consumado. Un nuevo gol en propia meta dejó el partido aparentemente resuelto para el Valencia, pero tras un tanto anulado a Villa por fuera de juego, el italiano Moretti hizo el empate a tres, en propia meta, con el tiempo prácticamente concluido lo que no sirvió a nadie: la Real se fue al descenso y el Valencia no pudo evitar que la campaña acabara con sabor agridulce.

Valencia 3 - R. Sociedad 3