Pérez acorta en 30 segundos su diferencia con Heras en la subida a Navacerrada
José Gutiérrez culmina con victoria una larga escapada
Santi Pérez (Phonmak) sólo pudo arañar 30 segundos a Roberto Heras (LST) en la subida al puerto de Navacerrada, lo que permite a éste conservar el maillot amarillo con una diferencia cercana al minuto (43 segundos), una renta holgada para afrontar la contrarreloj que pondrá mañana el broche final a la Vuelta 2004.
La etapa la ganó en solitario el compañero de Pérez en el equipo Phonak, José Gutiérrez, que culminó de esa manera una larga escapada. Su tiempo en meta fue de 4 horas, 52 minutos y 20 segundos con una diferencia de 38 segundos sobre el segundo, el español Eladio Jiménez, del Kelme.
Por detrás, en el grupo de favoritos, hubo que esperar a la subida a Navacerrada para que se empezara a mover la carrera, a excepción de un batallador Mancebo (Banesto) que atacó en las últimas rampas del alto del León, pero que fue neutralizado por los corredores en el descenso.
La estrategia de derribo del Phonak
El Phonak, en una apuesta clara por recortar las diferencias en la clasificación general con Roberto Heras, endureció la carrera para eliminar corredores del Liberty y dejar al ciclista bejarano con toda la responsabilidad para responder a los ataques de Santi Pérez. Sin embargo, fue el madrileño Luis Pérez (Cofidis), buen conocedor de la sierra madrileña, el primero en abrir las hostilidades con un duro ataque que eliminó a los gregarios de Roberto Heras a excepción de Isidro Nozal, encargado nuevamente de marcar un ritmo que fuera eliminando rivales.
Fue Alejandro Valverde (Kelme) el primero de los favoritos que puso a prueba las fuerzas del jersey oro, que aunque reaccionó bien ante este primer ataque, vio cómo perdía la compañía del único hombre de equipo que aún le quedaba.
A cuatro kilómetros para la línea de meta, el asturiano Santi Pérez lanzó el ataque definitivo, que sólo Roberto Heras fue capaz de seguir. El bejarano, que en un principio parecía encontrarse cómodo con el ritmo impuesto por el corredor del Phonak, fue poco a poco perdiendo fuerzas, y a dos kilómetros para el final de la etapa tuvo que ver cómo perdía definitivamente la rueda del ciclista asturiano.
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