La posibilidad de una sanción al Camp Nou planea tras el derby

El bochornoso espectáculo que se vivió ayer en el Camp Nou sigue coleando hoy mientras planea sobre el estadio del Barça una suspensión que dependerá de si el Comité de Disciplina considera graves o muy graves los incidentes protagonizados por los Boixos Nois y que obligaron al árbitro a parar el partido durante varios minutos. El cruce de declaraciones entre ambos clubes ha continuado hoy con las palabras de Figo.

El martes, la Federación deberá decidir el nivel de gravedad de los sucesos. Si los incidentes protagonizados por el público son considerados "muy graves", según el artículo 109 de los Estatutos, el estadio se podría clausurar por un periodo de entre cuatro partidos y toda la temporada, y una multa de hasta 12.000 euros. Si los incidentes se consideran "graves", se aplicaría el artículo 118, que señala que la sanción es de uno a tres partidos y una multa de hasta 6.000 euros.

Mientras, el cruce de declaraciones entre representantes de ambos equipos ha continuado hoy. Ayer, Gaspart iniciaba el intercambio de golpes cuando aseguraba que "el público respondió a una provocación" del jugador portugués. Luego, Van Gaal refrendaba la opinión de su presidente: "Figo provocó lo sucedido". Valdano respondía diciendo que "Gaspart debería ser más cortés y que cada vez resulta más difícil venir este campo".

Hoy, Figo ha respondido a las palabras del que fue su entrenador durante dos años y medio. El portugués se ha declarado sorprendido de las manifestaciones de Van Gaal, "sobre todo cuando no se ha referido a mí en dos años, incluso en las muchas ocasiones que le he salvado el culo".

Desde Barcelona, dos de los argentinos de la plantilla barcelonista, Riquelme y Bonano, han minimizado los incidentes, en comparación con los que han tenido que soportar en Argentina. Bonano incluso ha comentado cómo, en una ocasión, quedó inconsciente al recibir una pedrada. "Comparado con esto, lo de ayer no es nada", ha dicho.

Hechos premeditados

También desde el plano político se han comentado los incidentes y mientras desde la alcaldía de Barcelona se han minimizado los acontecimientos, la delegación del Gobierno en Cataluña habla de "hechos graves y probablemente premeditados".

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, ha declarado que los incidentes de ayer en el Camp Nou no dieron una mala imagen de la ciudad de Barcelona, aunque ha lamentado que hubiese "unas cuantas personas que no estuvieran a la altura del civismo que se necesita para estar en una concentración deportiva como esta". Según Clos "hay que hacer una reflexión sobre el mundo deportivo y sobre los periodos previos a este gran acontecimiento que se calientan muchas veces por intereses comerciales, para vender más".

Por su parte, la delegación del Gobierno en Cataluña ha dicho hoy que los altercados se anoche son "hechos graves y probablemente premeditados" al tiempo que ha criticado "la sobredosis de barcelonismo o antibarcelonismo" con la que han reaccionado algunas personas vinculadas a estos clubes, en referencia a las declaraciones de Gaspart.

También subraya que los altercados fueron "probablemente premeditados por un grupo que no representa a la afición del Barcelona, aunque también se magnifican por un acontecimiento como es el Barca-Madrid".