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Noticias teñidas de “sensacionalismo extremo”

El Consejo Audiovisual de Andalucía examina casi 70 horas dedicadas a la desaparición y muerte del niño Gabriel

R. G. Gómez
Periodistas entrando en directo en el lugar de la detención de Ana Julia con el cadaver del niño Gabriel Cruz en el maletero de su coche.
Periodistas entrando en directo en el lugar de la detención de Ana Julia con el cadaver del niño Gabriel Cruz en el maletero de su coche.Francisco Bonilla

La cobertura televisiva de la desaparición del niño de ocho años Gabriel Cruz en Las Hortichuelas (Almería), hallado muerto a los pocos días, incurrió en un “sensacionalismo extremo” y en “graves incumplimientos” éticos. Este es el diagnóstico del Consejo Audiovisual de Andalucía (CAC), que ha examinado casi 70 horas de contenidos de TVE-1, Antena 3, Telecinco, La Sexta, Cuatro, Canal Sur e Interalmería los días 6 y 7 de marzo, en plena búsqueda del menor, así como el 12 de ese mismo mes, tras la detención de la pareja del padre del niño, autora confesa del crimen.

El informe cuestiona el “abultado tiempo” dedicado a la cobertura del caso, especialmente en los programas de entretenimiento. El 12 de marzo, Espejo público y Sálvame fueron prácticamente monográficos. El CAC remarca la descompensación entre el tiempo destinado a difundir información contrastada sobre la investigación y la divulgación de elucubraciones y especulaciones realizadas por los colaboradores.

“Ante la falta de novedades informativas”, observa el estudio, “algunos programas alargaron la cobertura de la noticia repitiendo contenidos irrelevantes, con conexiones en directo sin valor informativo y difundiendo rumores sin contrastar”. Y remarca que Espejo público y El programa de Ana Rosa asumieron como propio un papel investigador para la resolución del caso.

También remarca que los magacines pusieron en duda las conclusiones de la investigación oficial para alimentar las tesis sobre la culpabilidad de un primer sospechoso. Y lo hicieron mediante “la difusión reiterada de rumores, especulaciones y hechos no contrastados”. Además, algunos espacios emitieron como “muy fiables” testimonios de vecinos que transmitían falsedades ya descartadas por la investigación.

El CAC ha traslado el informe a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, así como una queja recibida en la Oficina de Defensa de la Audiencia en la que se denuncia un “linchamiento movido únicamente por el afán de dar noticias rápidas y captar audiencia”.

La autoridad andaluza alerta del “preocupante deterioro” en el ejercicio de la función de informar sobre tragedias personales con gran impacto emocional en la opinión pública.

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