Caitriona Balfe: “Cuando hay equilibrio de sexos en la sala de guionistas, tienes una serie mejor”

El día en el que tuvo lugar esta entrevista en Glasgow, Caitriona Balfe (Dublín, 1979) se despedía de los años sesenta. "Los voy a echar de menos, el pelo, el maquillaje, los vestidos... era una buena época en la que estar". La protagonista de Outlander, Claire, ha regresado al siglo XVIII para reencontrarse con Jamie Fraser. Llega así uno de los momentos más esperados por los fans de la serie basada en las novelas de Diana Gabaldon, cuya tercera temporada emite los lunes Movistar Series. Un episodio más largo de lo habitual (de 75 minutos) reúne a los dos protagonistas. "Es un reto para Sam [Heugan, que interpreta a Jamie Fraser] y para mí, dar con la forma de recrear nuestra relación en una forma nueva. Ahora Jamie y Claire son muy diferentes a como eran cuando se vieron por última vez, han pasado 20 años, toda una vida de experiencias. Hay cierta energía que se mantiene, pero las circunstancias son muy diferentes", adelanta la actriz.

Con más de 20 millones de ejemplares vendidos, la saga Outlander es todo un fenómeno literario que ha conseguido trasladar sus fans a la pequeña pantalla. Esa legión de entregados seguidores suponen una presión extra para todos los implicados en la serie. "Entiendo la emoción de los fans por sus personajes y que los sientan de su propiedad, han vivido con ellos más tiempo que nosotros", dice la actriz. "Pero los guionistas no pueden depender de intentar cumplir sus expectativas. Si vas pensando en cómo quedará algo o cómo se recibirá, matas la creatividad. Hay que saber dar un paso atrás respecto a los fans porque, si no, te puede cegar y no dejarte ser objetivo", reflexiona la actriz.

La traslación de una historia literaria al medio audiovisual también supone cambios inevitables y dejar muchas cosas fuera. "Tengo el libro en mi camerino. Hay mucho de lo que ocurre en los libros, sobre todo en la parte de monólogo interior de Claire, que me ayuda a entender el personaje. Y por supuesto, hay cosas en los libros que dices, ¿cómo que no vamos a hacer esto? ¡Es importante! Puede resultar decepcionante a veces, claro, pero tenemos que dejar cosas fuera".

Tras el reencuentro del capítulo de este lunes, la tercera temporada de Outlander enfila una nueva etapa que deja atrás Boston y pone su mirada en Escocia, el océano y Jamaica, para lo que el rodaje se trasladó a Sudáfrica. Una serie que vive en un movimiento constante por el que Caitriona Balfe da gracias. "Como actriz es genial que tengas que ir de set en set. No puedo imaginar lo aburrido que tiene que ser ir siempre al mismo decorado, como vivir el día de la marmota. Estaría subiéndome por las paredes".

Más allá de Outlander, el currículum como actriz de Balfe es corto. Antes de la interpretación, su pasado estaba vinculado a la pasarela. "Estudié teatro en Dublín y luego tomé otro rumbo hacia la moda. Cuando decidí volver y ser actriz, algunas personas decían que ya era demasiado mayor para eso. Así que fue todo un salto de fe, es un sueño hecho realidad. Me alegro de que haya ido bien, porque no tenía un plan b", ríe ahora la actriz, que gracias a Outlander ya suma dos nominaciones a los Globos de Oro. "Hacer este papel y tener la responsabilidad de hacer este personaje me ha dado mucho, tanto como experiencia profesional como personal. Interpretar a alguien tan fuerte y con tanta confianza en sí misma... Espero que algo de Claire se me haya pegado".

Para Balfe, su personaje es un icono feminista. "Quizá ella no sepa que lo es, pero sí. Es una mujer fuerte con una carrera y dos maridos..., lo que quizá no sea la definición técnica del feminismo... más bien diría que está en la categoría de mujer afortunada", bromea la actriz. "Se mantiene por sí misma y exige que se la respete sin importar el tiempo o la persona que está delante. En ese sentido, sí que es una feminista".

La propia serie reivindica a la mujer tanto en la pantalla (la historia, que combina romance, historia y aventuras, se narra desde un punto de vista femenino) como fuera de ella, con mayoría de mujeres en la sala de guionistas. "Es importante que ocurra porque la mitad de la población del mundo es mujer. Una vez que eres más inclusivo y tienes un equilibrio entre los dos sexos en la sala de guionistas, solo puedes lograr una serie mejor porque tienes una visión del mundo adecuada", reflexiona la actriz. "En algunas series, tienes un protagonista masculino poliédrico y el resto de personajes femeninos son secundarios y en dos dimensiones. Aquí tienes una protagonista femenina fuerte y un protagonista masculino genial también y el resto de personajes son poliédricos también, con lo que consigues una muestra equilibrada de las relaciones y la vida", concluye Balfe.