Primero el accidente nuclear, luego el crimen

Tras año y medio de escritura de guion que ha ido en parte en paralelo con la preproducción, el lunes comienza el rodaje de La zona, la nueva serie de Jorge y Alberto Sánchez-Cabezudo. “Es un policíaco que no va de averiguar quién lo hizo, y hasta ahí puedo contar”, dice crípticamente el primero de ellos sobre la que será la primera serie que se estrene —previsiblemente, en octubre de este año— de la reforzada apuesta de Movistar + por la producción propia.

La intención es poner el listón muy alto. Los hermanos Sánchez-Cabezudo son los creadores de la alabada Crematorio. Y ante la cámara contarán con un potente reparto. Eduard Fernández, como protagonista, estará acompañado, entre otros, por Emma Suárez, Álvaro Cervantes, Alexandra Jiménez, Alba Galocha, Juan Echanove, Luis Bermejo, Carlos Bardem, Manuel Solo, Fátima Baeza, Marina Salas, Luis Zahera, Tamar Novas o Sergio Peris-Mencheta.

En cuanto a la trama, prefieren no dar muchos detalles para mantener el misterio. Tres años después de un accidente en una ficticia central nuclear en el norte de España, un inspector de policía (interpretado por Eduard Fernández) vuelve al trabajo tras una larga baja para investigar un crimen. Su labor irá mostrando cómo la naturaleza, la sociedad y la vida se han ido abriendo paso en los alrededores de la central. “La evolución del protagonista tiene un poco de road movie, cada capítulo presenta un universo nuevo”, dice Jorge Sánchez-Cabezudo, mientras que su hermano describe la serie como “un thriller policíaco de frontera” en el que tan importante es el protagonista como tener un buen ramillete de personajes capaces de sostener sobre sus espaldas la multitud de tramas secundarias. “Es una serie llena de humanidad y de las humanidades de los personajes. Todos tienen una motivación para hacer lo que hacen”, dice Eduard Fernández, que se adentra con La zona en un territorio, el televisivo, que ha explorado poco. “El volumen de trabajo es muy grande. Es algo que no he hecho nunca antes”.

Para recrear el escenario en el que se desenvuelven los personajes, el equipo de la serie grabará en 160 localizaciones diferentes de Asturias y Madrid. “Nuestra base de operaciones será Gijón, y grabaremos en unos 30 o 40 kilómetros alrededor”, detalla Alberto Sánchez-Cabezudo a EL PAÍS. “Recreamos un universo que no existe pero es una serie muy realista. El puzle para construirlo es complicado”, añade. Los responsables de la serie quieren huir de la imagen postapocalíptica que suele acompañar a las historias que parten de un desastre de estas características. “Visualmente va a ser algo apabullante, muy impactante”, dice Alberto. “Pero como para fotografiar mal Asturias... Tenemos una materia prima maravillosa”, añade su hermano Jorge. “Queremos de fondo el escenario verde de Asturias con la intención de reflejar el contraste inquietante entre la belleza del entorno y la presencia de un enemigo invisible”, apostilla Alberto.

Ahora arrancan 15 semanas de rodaje para los ocho capítulos de 50 minutos de que constará la primera temporada (una segunda entrega es una opción probable, según apuntan desde Movistar), una grabación en la que los Sánchez-Cabezudo se meterán “en todos los charcos” en los que se puede meter alguien durante un rodaje. Mencionan lluvia, noche, animales, lobos... La naturaleza se abre paso en el mundo de La zona, así que cualquier cosa es posible.