Los toros de Miura una de las alternativas para inaugurar la Feria de Abril

Un cartel formado por los toros de la ganadería de Miura y un mano a mano entre los diestros Manuel Escribano y Daniel Luque podría anunciarse el domingo de Resurrección, 20 de abril, en Sevilla para inaugurar la temporada.

Si así fuera, pues nada hay confirmado, se trataría de una sorpresa mayúscula, ya que sería la primera vez que la legendaria divisa sevillana abriría la feria en lugar de cerrarla, como es tradicional, y harían el paseíllo dos toreros ‘inapropiados’ para esta fecha, habitualmente reservada para primeras figuras y reconocidos artistas.

Pero la negativa de El Juli, Morante, Manzanares, Perera y Talavante a anunciarse en la plaza de la Maestranza mientras continúe al frente de la misma la empresa Pagés ha cambiado todos los planes y ha creado un grave problema a los empresarios Ramón Valencia y Eduardo Canorea, que deberán hacer muchas cábalas para ofrecer un abono atractivo que no espante a sus clientes, convierta la feria en deficitaria y suponga el triunfo de los toreros retadores.

De ahí, esta extraña solución que rompe los esquemas de una feria tan conservadora como la sevillana al trasladar los toros de Miura del último día de feria al primero y colocar en el cartel a dos toreros que si bien cuentan con méritos suficientes carecen del marchamo de artistas que la señalada fecha de la inauguración de la temporada parece exigir.

Escribano triunfó en esta plaza el pasado año con los toros de esta misma ganadería cuando entró en el cartel para sustituir al lesionado El Juli; no figuraba en los carteles iniciales, le cortó las dos orejas a un noble miura y protagonizó una temporada ascendente hasta que sufrió una muy grave cornada en septiembre en un pueblo abulense que le obligó a guardar reposo hasta la reciente feria de Valdemorillo, donde ha reaparecido con éxito.

Daniel Luque, por su parte, se mantiene en la parte alta del escalafón, pero su toreo no levanta no levanta pasiones ni parece el complemente adecuado para un cartel de tan alta importancia.

En fin, sorpresa inicial a la espera de una confirmación que, se supone, sería la guinda de un ciclo revulsivo y supuestamente cargado de imaginación. De hecho, se especula con la posibilidad de que El Cid se encierre en solitario con seis toros de Victorino Martín, y que Enrique Ponce se anuncie dos tardes con ganaderías de ‘lujo’, como no podría ser de otra forma.