La política también domina a los candidatos al Globo de Oro en televisión

No sólo de cine vive el espectador como recuerdan anualmente los Globos de Oro, galardones que concede la Asociación de la Prensa Extranjera en Hollywood y que hoy anunciaron sus candidaturas, incluidas aquellas a los mejores trabajos televisivos del año. Pero al igual que la lista de aspirantes cinematográficos a este galardón, considerado el segundo en importancia tras el Oscar, los candidatos en las categorías de televisión se movieron en el campo de la política. Presidentes, terroristas y periodistas de ficción acapararon las principales candidaturas de unos premios donde el telefilme Game Change, centrado en la figura de la que fue aspirante a la vicepresidencia estadounidense Sarah Palin, se alzó como el favorito con un total de cinco nominaciones, mientras que la serie Homeland, que sigue la investigación de un agente de la CIA sobre un posible ataque terrorista en EEUU, le hizo sombra con cuatro menciones. Además, la última obra de Aaron Sorkin, The Newsroom, centrada en la redacción de un programa de televisión y donde la realidad informativa sirve de telón de fondo para la trama periodística, se quedó con ese codiciado puesto entre los mejores dramas del año que en anteriores ediciones habían ocupado series de ficción como Juego de tronos o The Walking Dead.

Incluso la recreación de un mundo que ya pasó como el de Mad Men quedó fuera este año de la lista de candidatos como mejor serie de televisión dramática donde junto a Homeland y The Newsroom compiten la segunda temporada de Downton Abbey, el principio del adiós de la magistral Breaking Bad y una vez más el sobrio y violento trabajo de Boardwalk Empire. La política también hizo acto de presencia entre los nominados en las categorías de comedia o musical con Julia Louis-Dreyfus aspirante a mejor actriz gracias a su trabajo como vicepresidenta en VEEP o Sigourney Weaver y la miniserie Political Animals destacados en esa categoría con un trabajo entre la comedia y el drama sobre una familia en la Casa Blanca.

Pese a la ausencia de Mad Men entre los nominados, una de las sorpresas en esta lista de candidaturas que por lo demás tiene bastantes puntos en común con la última edición de los Emmy televisivos, su protagonista Jon Hamm consiguió mantenerse entre los aspirantes al galardón a mejor actor de serie dramática, un honor que comparte con Steve Buscemi (Boardwalk Empire), Bryan Cranston (Breaking Bad), Jeff Daniels (The Newsroom) y Damian Lewis (Homeland). Como mejor actriz apunta como favorita la ganadora del pasado año, Claire Danes por su trabajo en Homeland en una lista de candidatas que incluye también a Glenn Close por su despedida en Damages, Connie Britton por su debut en Nashville y Michelle Dockery y Julianna Margulies por su retorno en Downton Abbey y The Good Wife, respectivamente. En la categoría de comedia musical las series ya perenemente presentes como Modern Family, Episodes y The Big Bang Theory hicieron hueco a nuevas series como la musical Smash y Girls, considerada una cruda réplica a Sexo en Nueva York pero para otra generación de jóvenes neoyorquinas más cercana a la realidad actual donde su creadora y protagonista, Lena Dunham, aspira al galardón como mejor actriz en este apartado.

Zooey Deschanel (New Girl) y Tina Fey (Rockefeller Center) también aspiran junto a Dunham y Louis-Dreyfus al galardón como mejor actriz de comedia o musical, categoría que completa Amy Poehler por la serie Parks and Recreations. Irónicamente Poehler y Fey serán las presentadoras de la gala de los Globos de Oro que tendrá lugar el próximo 13 de enero en el hotel Beverly Hilton de Los Angeles.