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El reto de ser ‘seriéfilo’ en España

Cambios en la programación de las ficciones y horarios tardíos en las emisiones

Natalia Marcos
El actor Aitor Luna, protagonista de la serie de Telecinco 'La fuga'.
El actor Aitor Luna, protagonista de la serie de Telecinco 'La fuga'.

Martes noche. Alguien enciende la televisión y sintoniza Cuatro para ver el siguiente capítulo de American Horror Story. Pero no es ese programa el que aparece en pantalla. De una semana a otra, la ficción ha cambiado de los martes a las 22.30 a los miércoles a las 00.15 horas. Los cambios en la parrilla de las cadenas y la tardanza en emitir las series extranjeras son algunas de las principales quejas de los espectadores. Los bailes de horarios y fechas de emisión que sufren muchos programas obligan a sus seguidores a permanecer atentos para poder ver el siguiente episodio. Estos cambios no solo afectan a las series que vienen de fuera de nuestras fronteras. El producto nacional también sufre las consecuencias de estos los movimientos. Dos casos recientes los encontramos en Telecinco con Homicidios y La fuga. Los retrasos en el horario de emisión de la primera provocaron las protestas en Twitter de su protagonista, Eduardo Noriega. La fuga sufrió cambios de hora y de día en la parrilla de la cadena. No son los primeros casos ni serán los últimos. ¿Por qué ocurren estos movimientos?

“A los programadores no nos gustan los cambios. La estabilidad es un síntoma de fortaleza. Pero las expectativas no siempre se cumplen”, explica Patricia Marco, directora de antena de Mediaset. “A veces, no pones la serie el día correcto, o no es su horario, o colisiona con otros programas. En algunas ocasiones, preferimos salir del horario de más competencia para poder enseñar el producto por detrás y que pueda tener más aceptación”, comenta en una conversación telefónica.

Estos cambios pueden llegar a desubicar al espectador y que no sepa dónde y cuándo ver una serie determinada. ¿Cuál es la solución? “Somos los primeros que no queremos variar el horario de emisión de un programa. Pero si lo tenemos que hacer, realizamos un esfuerzo por que se conozcan los cambios, aunque no digo que siempre lo consigamos”, explica Marco. Para Sonia Martínez, directora de ficción de Antena 3, lo peor que puedes hacer con una serie es moverla. “Cambiar la cita es la mejor manera de perder al espectador”.

La estabilidad es un síntoma de fortaleza. Pero las expectativas no siempre se cumplen

Otra de las quejas más repetidas entre los seriéfilos es la tardanza en la emisión en las cadenas en abierto de algunas series respecto a su emisión original. Según explica Mercedes Gamero, directora de producción ajena de Antena 3, “intentamos acortar los plazos, pero a veces se tiene el material y la tiranía de la parrilla se impone obligando a retrasar la emisión porque no hay hueco”.

En algunas ocasiones, series que tienen una gran consideración por parte de la audiencia, como Dexter, Mad Men o True blood, se emiten pasada la medianoche, horario poco accesible a la mayoría del público. Lo que se podría entender como una forma de relegar el programa a un segundo plano, es explicado por Patricia Marco como una cuestión de diferentes hábitos de consumo televisivo. “En el prime time, se ve la televisión acompañado y se prefieren programas de entretenimiento. Más tarde se da un consumo de televisión de forma individual, más calmado. En esas horas encajan mejor productos de mucha calidad, como Mad Men o American Horror Story, que no todo el mundo ve”.

Otra dificultad para seguir una ficción en España es la costumbre de emitir varios capítulos seguidos, algo que, para Patricia Marco, funciona muy bien. “Hemos comprobado que las noches temáticas gustan. Cuando sigues con el mismo producto toda la noche, va subiendo el share con cada capítulo”. Para Mercedes Gamero, directora de producción ajena de Antena 3, otro factor que explica este hecho es la duración de los episodios. “Los capítulos de series extranjeras suelen durar unos 40 minutos, mientras que los de las ficciones españolas tienen 80 minutos. Si se programara solo un episodio, dejaríamos a los espectadores colgados a mitad de la noche”.

Los canales secundarios de las cadenas también lucen las series como buque insignia. Es el caso de The Big Bang Theory, Dos hombres y medio o Cómo conocí a vuestra madre en Neox, o con el estreno de la nueva versión de Los ángeles de Charlie en Factoría de Ficción. Como explica Mercedes Gamero, de Antena 3, “se trata de intentar dotar a cada canal de personalidad propia, darles pequeñas perlitas para ayudarles a crecer”. Para Patricia Marco, no se trata de ‘relegar’ esas producciones dentro de su programación, sino que esos canales se entienden como “una ventana a otros productos de calidad y diferentes”.

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Sobre la firma

Natalia Marcos
Redactora de la sección de Televisión. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera en EL PAÍS, donde trabajó en Participación y Redes Sociales. Desde su fundación, escribe en el blog de series Quinta Temporada. Es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid y en Filología Hispánica por la UNED.

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