Una tarde en el “museo” del World Press Photo
Un grupo de suscritores de EL PAÍS disfruta de una visita privada por la prestigiosa colección de fotografía, en Madrid
Son las 20.00 de la tarde de un jueves cualquiera y un grupo de 20 suscriptores de EL PAÍS aguarda al guía que les enseñará la World Press Photo 2023, en Madrid. La prestigiosa exposición de fotoperiodismo, que hace solo unas semanas llegó a Madrid dentro de una gira que recorre 70 ciudades, invitaba a los espectadores a una visita tranquila, sin más público que ellos y el silencio abrumador que devuelve la impactante selección de fotografías ganadoras de uno de los concursos de fotografía más relevantes del mundo. “Son obras de arte. Parece que estás en un museo”, reflexionaba José Manuel Vicente, de 60 años, que se había apuntado a la actividad del programa de experiencias para suscriptores de EL PAÍS+.
El paseo por la instalación, en el espacio Larra-Laboratorio de Periodismo de la capital, fue acompañado de la explicación experta de Juan Pablo Campistrous. El guía ofreció un recorrido por una selección de instantáneas de todas las categorías premiadas. Comenzó por poner en valor el prestigioso premio que, en esencia, aboga por la libertad de prensa y pone la mirada en las historias que hay detrás de las fotografías. Los 24 proyectos expuestos, que difícilmente pueden verse en una hora con detenimiento, reflejaron toda suerte de sensaciones a los visitantes.
Para muchos en la visita guiada del pasado jueves 14, la percepción mayoritaria era común. “La inmensa mayoría de fotos son mensajes denuncia”, reflexionó una persona del grupo en voz alta. “Casi todas remueven por dentro”, comentó otra. Ocurrió especialmente cuando el grupo se detuvo en una de las fotos ganadoras del certamen, la de una mujer embarazada y herida en uno de los bombardeos del inicio de la guerra en Ucrania, autoría del ucranio Evgeniy Maloletka. La foto, que mostraba el sufrimiento por el conflicto, fue una de las más comentadas por el grupo, que quiso detenerse también en otras instantáneas de la guerra, como el conjunto tomado por el español Emilio Morenatti, y que también recibió una mención de honor en el certamen por su reportaje sobre civiles y heridos.
Pero no todo en la muestra fueron conflictos armados. A una pareja de asistentes les gustó mucho una foto diferente, casi posada, en la que se representaba una de las denominadas casas de bruja, uno de los centros de Ghana donde se encierran a mujeres que padecen demencia. La superstición hace que el país concentre en estos centros a mujeres mayores― “donde ellas son brujas y ellos no”, explicaba el guía― , tan solo por sufrir enfermedades como el alzhéimer o esquizofrenia.
“Nos causan inquietud las fotos demasiado sensibles. Preferimos las fotos menos explícitas porque nos quedamos con lo que transmiten”, comentaron Esperanza Morato y su esposo, que también se unieron a la actividad. Otros miembros del grupo se detuvieron algunos minutos en el retrato de la sequía en Perú, en el que se mostraba los estragos de la falta de agua en el territorio de Los Andes. La visita también posó la mirada en un reportaje de largo seguimiento sobre la crisis migratoria, un instante en la victoria de Argentina del Mundial o hasta en un reportaje de nuevas narrativas sobre un nuevo género musical: el drill. Este último, un retrato urbano en torno a este nuevo estilo musical y de tendencia, se mostraba acompañado de un código QR para disfrutar la muestra junto a una playlist de canciones de drill. Varios hacen lo propio y dicen guardar la lista.
La exposición itinerante del World Press Photo 2023 ofrece 160 imágenes de una treintena de fotógrafos de todo el mundo. Las imágenes de cuatro categorías ―Imágenes individuales, Reportajes gráficos, Proyectos a largo plazo y Formato abierto― fueron elegidas por un jurado internacional de seis regiones: África, Asia, Europa, Norteamérica y Centroamérica, Sudamérica y Sudeste Asiático y Oceanía. Después de una gira mundial por 30 países, la de Madrid ha sido la última exposición del año de una ya emblemática muestra que cada año atrapa a miles de visitantes.
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