_
_
_
_

El duende español de Chick Corea

El músico volvió a hacer posible en el Teatre Grec la imposible mezcla entre jazz y flamenco

Chick Corea en el Teatre Grec.
Chick Corea en el Teatre Grec.CARLES RIBAS

Todo el Teatro Grec de Barcelona en pie moviéndose y picando palmas y cantando eufóricamente el estribillo de Spainfue el colofón idóneo a más de dos horas de música cálida, expansiva y contagiosa. Y Chick Corea exultante, con una sonrisa que no le cabía en la cara, dirigiendo al personal desde sus teclados y, al final, hasta intentando unos pasos de baile un tanto patosos al compás de la flauta de Jorge Pardo en un escenario abarrotado de espontáneos bailarines que se mezclaron con los músicos ante el pavor impotente del, en algunos casos bastante desagradable, servicio de acomodadores del recinto municipal.

El compositor de jazz norteamericano ha visitado Cataluña en muchas ocasiones y a menudo se ha acercado con respeto y entusiasmo al mundo del flamenco. Una idea musical que ha evolucionado mucho en los 43 años que separan el hoy de la edición de su primer acercamiento My Spanish Heart (que ahora da nombre a su banda). En este largo periodo, Corea se ha codeado con alguno de los grandes de esa música, comenzando con Paco de Lucía, cuyo espíritu sobrevoló el anfiteatro toda la velada. Un par de esos grandes estaban una vez más a su lado el pasado domingo en el marco del Festival Grec: el pletórico saxofonista y flautista Jorge Pardo y el guitarrista Niño Josele. En el resto del noneto se mezclaban las esencias latinas (soberbio el contrabajista cubano Carlitos del Puerto) con el jazz contemporáneo (también soberbio el trombonista Steve Davis).

Chick Corea and the Spanish Heart Band

FESTIVAL GREC

Chick Corea

Festival Grec

Teatre Grec

Barcelona, 28 de julio de 2019

Comenzó la velada, como para desconcertar al personal, con una recreación pianística de un Pas de deux de Igor Stravinsky que se empalmó con un tema salsero que ya caldeó el ambiente a pesar de que las partes cantadas dejaron mucho que desear (nadie volvió a cantar en todo el concierto). A partir de ahí las aguas ya llegaron a las costas de Algeciras y la figura de Paco de Lucía cobró un protagonismo que se acrecentó en el tema final del programa, Zyriab, en cuya grabación original de 1990 ya intervenía Corea.

Niño Josele estuvo pletórico sin imitar nunca a Paco y Pardo se rajó una vez tras otra y le plantó cara al líder en dúos sorprendentes. En la parte más flamenca, el bailaor bostoniano Nino de los Reyes mostró un zapateado contundente, aunque su baile fuera un tanto exhibicionista.

Corea ha ido creando un estilo propio de entender la posible e imposible mezcla del flamenco con el jazz. En el Grec demostró y derrochó esa maestría y lo hizo sin aparentes pretensiones. Su duende explotó y arrebató al personal... Y como bis, no podía ser ningún otro, Spain coronó la velada. Y todo el mundo a bailar ocupando pacíficamente el escenario. Y así el personal se fue a casa con el cuerpo moviéndose acompasadamente y sin poderse sacar de la cabeza la cantinela del mítico tema.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_